El rector Tassara aseguró que las reservas de recursos propios garantizan el funcionamiento de la Unicen
El rector de la Universidad del Centro participó de una reunión del CIN donde las universidades nacionales definieron el pedido de un refuerzo presupuestario de 4 mil millones de pesos. La Unicen llegará a fin de año gracias a las reservas de recursos propios acumuladas. Creció la demanda de ayuda estudiantil en las casas de estudio de todo el país.
En medio de un contexto signado por la incertidumbre y la falta de previsibilidad económica, el rector de la Universidad Nacional del Centro Roberto Tassara participó la semana pasada del plenario de rectores del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) que se desarrolló en la Universidad Nacional del Nordeste, con sede en las ciudades de Corrientes y Resistencia.
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Los temas más importantes que marcaron la agenda fueron el pedido de una partida presupuestaria extra de 4 mil millones de pesos para reforzar las arcas de las 57 casas de estudios que conforman el consejo y el debate sobre el Presupuesto Universitario 2020.
Entrevistado en el piso de Eco TV en el ciclo matutino Tandil Despierta, Tassara enfatizó que son conscientes de la situación del país y de las peripecias que atraviesan las clases trabajadoras y más desfavorecidas y dejó en claro que el reclamo del CIN tiende, sobre todo, a cubrir con esos fondos extraordinarios cuestiones atinentes al bienestar estudiantil.
“No son solamente los pagos de luz, gas, combustible, insumos, sobre todo están las cuestiones de los estudiantes, porque se incrementa en todas las universidades la cantidad de chicos que necesita el comedor, las residencias, el valor de las becas quedó desactualizado, el cuidado de la salud. La necesidad de retener a nuestros estudiantes se siente”, explicó.
La situación de la Unicen
A diferencia del año pasado, que el ahogo presupuestario fue más contundente, y de las circunstancias que atraviesan otras universidades nacionales, la Unicen podrá llegar a diciembre haciendo uso de reservas y recursos propios. Siempre con la salvedad de que el rumbo de la economía no se dispare de manera más incierta aún.
En 2018, el funcionamiento de universidad regional se vio comprometido ante la corrida cambiaria, la inflación y los tarifazos, situación que quedó subsanada gracias al oxígeno que aportó una partida adicional de 20 millones de pesos inyectados a último momento.
“No compramos equipamiento, pero llegamos con recursos propios que hemos acumulando y podemos sostener la situación hasta fin de año, no va a haber crisis de funcionamiento, pero tratamos de ser austeros”, precisó.
En este sentido, destacó que el principio que rige los engranajes es continuar sosteniendo el empleo, la calidad de la enseñanza y la investigación y las políticas de inclusión, pese a los vaivenes financieros.
También se mostró a favor de que los docentes universitarios puedan cobrar el bono de 5 mil pesos anunciado por el Gobierno nacional, que por el momento los excluye.
“Necesitan un reconocimiento en alguna de esas medidas que son muy paliativas, se charló con el secretario de Política Universitarias, tienen cláusula gatillo en noviembre y febrero, se entiende que ahí el poder adquisitivo debiera ser recuperado, pero ahora la ayuda sirve para aliviar”, opinó.
El sostenimiento a los estudiantes
Recientemente, el Consejo Superior de la Unicen votó la afectación de una partida especial de sus fondos por un monto de un millón de pesos para cubrir necesidades urgentes del alumnado, orientada a garantizar la permanencia de los jóvenes en las unidades académicas.
En conjunto, la Secretaría de Bienestar Estudiantil y el centro de estudiantes de cada facultad analizan y monitorean cada caso para hacer llegar la ayuda correspondiente de acuerdo a las normas.
Según informó Tassara, los aportes para sostener el comedor y las residencias son mayores de lo previsto inicialmente, debido a la profundización del escenario de crisis y la pauperización de las clases trabajadoras.
Dentro de este espectro de situaciones se hallan los casos de estudiantes provenientes de otras localidades que no se alojan en la residencia, sino que alquilan una propiedad en la ciudad, pero ya no pueden llegar a abonar el costo del arrendamiento.
“Tandil tiene turismo, el Polo Informático, pero en el Gran Buenos Aires hay pymes y changas y las dos se caen a pedazos, es una situación severa”, señaló el rector, en alusión a un diálogo mantenido con sus pares del Conurbano Bonaerense, cuyo tejido social y productivo se constituye de modo diferente al de ciudades como Tandil o Mar del Plata, por ejemplo.
Cabe reseñar que las instituciones de los grandes centros urbanos del área metropolitana son las que más comprometido tienen su funcionamiento producto del crecimiento de los casos de ayuda a los estudiantes cuyos gastos deben afrontar.
Presupuesto 2020
Por otra parte, las autoridades académicas ya comenzaron a hablar sobre la pretensión presupuestaria para el año 2020, que deberá dirimirse próximamente. Según está pautado, alrededor del 15 de septiembre el Poder Ejecutivo nacional deberá presentar en el Congreso el Presupuesto 2020 para su tratamiento y aprobación en el recinto.
Al respecto, detalló que “debiera ser el plan estratégico puesto en números de necesidad financiera, pedimos cuestiones que tienen una razonabilidad dentro de lo que el sistema universitario tiene que hacer para mantener la excelencia y la permanencia”.
Además, los representantes universitarios redactaron un documento a raíz del panorama generado después de las PASO, para poner al servicio del Estado los equipos técnicos y la asistencia necesaria para llegar a la mejor salida posible.
“El sistema tiene fortalezas técnicas y académicas puestas a disposición. Creemos que el país requiere que estas instituciones sostenidas por el pueblo estén el servicio porque la educación superior es un derecho humano universal”, expuso.
