El Municipio desiste de la compra de Metan y convierte esas manzanas en Zona Especial de Interés Urbanístico
La iniciativa elevada por el Ejecutivo se debatirá hoy en la sesión legislativa. El mismo destino tendrá el predio de Metalúrgica Tandil. El Estado municipal retira los indicadores de ambos macizos urbanos con intención de intervenir en cualquier proyecto futuro.
El Concejo Deliberante tratará hoy los proyectos de ordenanza para declarar a los predios de la exMetan y de Metalúrgica Tandil en Zonas Especiales de Interés Urbanístico (ZEIU), lo que implica que ambos macizos ya no tendrán indicadores urbanísticos y el Estado municipal se reservará la intervención ante cualquier proyecto que se proyecte a futuro. En simultáneo, el Ejecutivo desistirá de la compra o expropiación de las dos manzanas que ocupó la fundición de aluminio, donde pretendía construir un centro cívico para la administración de la comuna.
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Los proyectos de ordenanza cuentan con dictámenes de las comisiones de Interpretación y Asuntos Legales y de Obras Públicas, a partir de los consensos alcanzados en el Bloque de la UCR Cambiemos. Además, las iniciativas contarían con apoyo de algunas bancadas opositoras.
“Hay bastante coincidencia en las opiniones de nuestro bloque”, anticipó Mario Civalleri, presidente de la bancada oficialista y de la Comisión de Obras Públicas del Legislativo.
El exsecretario de Planeamiento y Obras Públicas explicó que de acuerdo con el Plan de Desarrollo Territorial (PDT), el Estado municipal tiene la potestad o posibilidad de definir que algunos sectores se transformen en Zonas Especiales, cuando tienen alguna característica que los distingue.
Y agregó que “básicamente se refiere a macizos urbanos de grandes dimensiones, que no quedan muchos en el área urbana”. De este modo, al declararse como ZEIU, se retiran los indicadores urbanísticos que tienen las zonas generales y “el día de mañana, cuando se decida una intervención en ese lugar, hay que plantear un proyecto y el Municipio, si el proyecto es satisfactorio para lo que es el sector de la ciudad y demás, aprueba determinado tipo de indicadores”.
Civalleri detalló que los ZEIU buscan que “el Estado pueda participar en la definición a futuro de lo que pasa con esos grandes espacios”.
El predio de Pujol
En principio, las tierras de la exMetan están divididas en parcelas, tal como figura en los registros de la Provincia. El concejal de la UC R Cambiemos sostuvo que esta situación “no quita” que el Municipio “pueda definir que esas dos manzanas tienen una característica especial”.
En paralelo, aclaró que al convertirse en ZEIU, algunos tipos de proyectos pueden ser “superadores” a partir de la intervención del Estado municipal, teniendo en cuenta que le puede interesar promover un uso singular de ese macizo.
Para graficar esas consideraciones, señaló que “ante un proyecto equis, se pueden decidir indicadores que le otorguen al lugar, por ejemplo, más altura. Al tratarse de manzanas completas, se puede decidir que un lugar como ese puede admitir un tipo de construcción que no es propio de un lote urbano común que tiene dimensiones más chicas. En una manzana se puede implantar otro tipo de equipamiento y de proyecto”.
Por otra parte, precisó que la asignación de indicadores a los ZEIU se realiza “a instancia de alguna de las partes o también se prevé que el propio Gobierno municipal defina usos e indicadores diferenciales para esa zona”, con el objetivo de alentar un determinado tipo de proyecto.
“Claramente, lo que el PDT establece es un mecanismo que le permita al Estado municipal participar en la definición de grandes proyectos urbanos en macizos, que no quedan muchos. Entonces, es una forma de tratar de garantizar que allí se van a desarrollar proyectos que sean convenientes para todo el entorno y para la ciudad”, resumió Civalleri.
Desisten de la compra o expropiación
En relación al pedido para desistir de la declaración de utilidad pública y sujeto a expropiación del predio de Metan, indicó que “concretamente, la elevación del Departamento Ejecutivo solicita la derogación de esa ordenanza, porque más allá de que era interesante el proyecto que se planteaba desarrollar allí, las condiciones económicas cambiaron mucho y con el tipo de cambio y demás, los valores obviamente se tornan inaccesibles en este momento para el Municipio bajo todo punto de vista. Así que el propio Departamento Ejecutivo pide el desistimiento de esa ordenanza”.
En ese aspecto, trascendieron cuestionamientos, como los del concejal justicialista Facundo Llano, a la decisión de descartar en forma definitiva el proyecto para construir el centro cívico que encarnó el jefe de Gabinete Julio Elichiribehety y que gestionó durante varios meses.
Desde su opinión, Mario Civalleri expresó que “me parece que dejar que conviva una ordenanza en la cual se declara a un predio sujeto a compra, permuta o directamente expropiación, y por otro lado, quitarle los indicadores urbanísticos, esa doble restricción puede ser visualizada hasta como una maniobra”.
Y consideró que “puede generar la situación de que al momento de avanzar con la expropiación, si se le quitaron los indicadores al predio, obviamente los valores de referencia del predio disminuyen y eso sí es un avasallamiento indebido del derecho de propiedad”.
Defendió la decisión del Ejecutivo, ya que “al derogar la ordenanza, se retira el interesado por el predio y obviamente después quedará en manos de los propietarios el tema de desarrollar proyectos y que sea el propio Estado el que defina el rol de esos predios en función de la trama urbana de la ciudad”.
