Los acusados del robo de 13 vacas en De la Canal aguardan en prisión preventiva el juicio oral
Tres personas fueron encontradas responsables del hecho de abigeato en De la Canal. Los dos mayores de edad aguardan bajo arresto el juicio oral, mientras que el menor debe cumplir con obligaciones sociales. La dueña del establecimiento se mostró conforme con los tiempos de la Justicia. Un robo que terminó de unir a un pueblo en busca de mayor seguridad.
Luego del robo de las 13 vacas del campo San Eusebio, en la localidad de De la Canal sucedido en marzo de este año, se inició una exhaustiva investigación que terminó dando origen a una causa con tres sospechosos que quedaron bajo prisión preventiva y actualmente se encuentran a la espera del juicio oral.
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En principio la denuncia fue tomada por el Comando de Prevención Rural de Tandil, siendo derivada luego a la Fiscalía 3 de Luis Piotti, pero como uno de los delincuentes es un menor de edad, automáticamente la causa quedó en la Fiscalía de Menores a cargo de María de los Ángeles Marsiglio.
Cabe recordar que el hecho de abigeato ocurrió en la mañana del 26 de marzo pasado, cuando tres personas se llevaron arreando a plena luz del día 13 vacas preñadas. A pocos días de cumplirse un mes del robo los culpables fueron detenidos. La orden de arresto fue librada tras días de recolección de pruebas y testimonios que permitieron avanzar con la pesquisa, pero al haber un menor implicado debieron contactar primero a los progenitores. Por este motivo fue que el padre de los jóvenes terminó informando sobre el paradero de sus hijos, no entregándolos por simple buena voluntad como se había interpretado en su momento.
Finalmente los dos mayores de edad involucrados en el arreo de las 13 vacas quedaron arrestados el 21 de abril pasado, primero alojados en la dependencia de la Patrulla Rural local y luego trasladados a la comisaría Primera. Por su parte, el menor está en libertad, pero con obligaciones sociales que cumplir.
Luego de esta instancia, la minuciosa investigación continuó en manos de la fiscal Marsiglio y la secretaria Florencia Giombini que ratificaron testimonios y evidencias para poder pedir al juez de Garantías que dicte la prisión preventiva que encarcele a los delincuentes hasta que comience el juicio oral. De esta manera, los dos detenidos quedarán bajo esas condiciones hasta que pese sobre ellos una sentencia firme.
Buenos resultados
“Fue muy importante lograr la prisión preventiva porque había un claro riesgo de fuga por parte de los delincuentes”, aseguró Florencia Repetto, dueña y administradora del campo San Eusebio. Ella además se mostró conforme con el trabajo realizado y la contundencia de los testimonios y pruebas recolectados para poder llegar al esclarecimiento. “Sé que es su trabajo, pero han tratado la causa con mucho esmero”, dijo agradecida.
Por otro lado, la productora afectada por el robo indicó que las causas tienen fechas de vencimiento que ejercen cierta presión y no siempre los plazos dan tregua, así que en este caso se mostró contenta con que los profesionales hayan llegado a resolver a tiempo.
Si bien queda todavía un camino por recorrer, porque los juicios orales son largos, se manifestó tranquila con que los responsables estén bajo arresto.
El robo que unió a la comunidad
Al otro día del abigeato, las vacas preñadas empezaron a aparecer en distintas zonas rurales, algunas cercanas al establecimiento y otras no. En principio la recuperación se fue logrando con la ayuda de la Patrulla Rural, pero después fueron los propios vecinos de De la Canal los que colaboraron con el regreso de la hacienda que quedaba suelta. Aproximadamente a la semana de ocurrido el hecho, ya habían podido rescatar a la totalidad de los animales.
Pero esto no fue todo, porque este tampoco había sido el único robo que tenía en vilo a los pobladores de De la Canal, sino que eran varios los que habían sufrido hechos similares o de otras características en el pueblo, incluso salió a la luz un caso de acoso sexual.
El robo de las 13 vacas a plena luz del día y ante la vista de los vecinos fue la gota que colmó la paciencia de todos. Fue por eso que, cansados de los hechos de inseguridad, unieron sus reclamos y convocaron a autoridades municipales y policiales para pedir que los ayuden a afrontar las problemáticas.
De esta manera, el viernes 5 de abril en el salón del Club Defensores de esa localidad más de 50 personas preocupadas por la creciente ola de delitos en el área recibieron al subsecretario de Protección Ciudadana del Municipio, David Tiffner, al subcomisario Regional Rodrigo Matos y al comisario titular de la Patrulla Rural Juan Martín Aguirre. Además, formaron parte del encuentro las concejales de UCR-Cambiemos e Integrar, Matilde Vide y Nilda Fernández. También participaron activamente Julio Pagola y Alejandro Tiscornia, presidente y secretario del Foro Municipal de Seguridad. El encuentro fue encabezado también por el presidente del Club Defensores De La Canal, Oscar Lasarte, y Esteban Sarabia, representante del establecimiento San Eusebio de dónde se llevaron la hacienda.
Promesas que se van cumpliendo
En el marco de esa reunión surgió una línea de trabajo en la no solamente se comprometieron las autoridades sino los vecinos. Así la Patrulla Rural destinó un móvil exclusivamente para la zona, bajo las sugerencias de patrullaje de los que viven allí y conocen el lugar y sus movimientos.
Con respecto al pedido de cámaras, David Tiffner advirtió que llevaría tiempo, sin embargo también hubo avances en ese sentido. Asimismo, se llevó para trabajar en la posibilidad de adquirir una antena que posibilite la comunicación fluida por teléfonos celulares y la red de whatsapp. Mientras que se garantizó potenciar el trabajo de los efectivos rurales con la presencia de la Policía Local.
Por su parte, ante la invitación del Foro de Seguridad a participar activamente de las reuniones mensuales los vecinos se turnan para poder asegurar la presencia de la localidad en estos encuentros.
Lo más grave dentro de los sucesos expuestos por la gente fue el reiterado acoso que sufren las menores que asisten a clases, fundamentalmente en los contraturnos de la siesta cuando en el pueblo “no hay ni un alma”. Siempre por parte de la misma persona. A pesar de las denuncias ejecutadas tano en la Patrulla como en la Comisaría de la Mujer, el hombre sigue asistiendo y diciéndoles barbaridades a las chicas, que en muchos casos no se animan ni a contarle a sus padres. En este sentido, invitaron a todos los que sepan algo a fortalecer las denuncias de acoso en la Comisaria de La Mujer y no dejar de seguir el tema. Además, se propuso realizar charlas sobre acoso y violencia para toda la comunidad.
Tal como se habían comprometido, los vecinos crearon un mapa georeferencial con todos los domicilios y establecimientos con sus correspondientes datos, para tener todos una mejor referencia, y además compartirlo con la Patrulla que muchas veces no puede llegar a ciertos sitios por desconocimiento de la zona, resultando totalmente ineficaz para el desempeño.