Una banda operaba teléfonos robados
Un “laboratorio” donde se desbloqueaban y liberaban teléfonos que habían sido previamente robados fue desmantelado en Cañuelas, donde además se detuvo al encargado del lugar, informaron fuentes policiales.
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La investigación se inició a raíz de una denuncia realizada a partir de la sustracción de un aparato y entonces efectivos de la Policía Federal (PFA) comenzaron a seguir las distintas geolocalizaciones que emitía el dispositivo, todas en cercanías de la mencionada localidad, situada a 70 kilómetros al sur de la Capital Federal.
Fue entonces que personal de la División Investigación de Delitos Tecnológicos logró localizar el domicilio exacto en donde se encontraba el aparato y descubrió que allí funcionaba lo que se conoce como “laboratorio”.
Según explicaron las fuentes, en estos talleres y/o mesas de trabajo se llevan a cabo tareas de desarme de los celulares y además cuentan con tecnología avanzada como cajas desbloqueadoras, las cuales utilizan un software específico para adulterar el IMEI de los aparatos, de manera tal que puedan ser reutilizados sin ser detectados por las compañías de servicios telefónicos.
Luego de la requisa, los uniformados encontraron 30 celulares (cuatro de ellos con denuncias por robo), once tablets, una notebook, dos netbook, varios talonarios de facturas y documentación de interés para la causa.
Además, fue detenido un joven de 25 años que se encontraba en el lugar y que se estableció que, para no ser descubierto, iba alternando de domicilios debido al desarrollo de su actividad.
El detenido y los elementos secuestrados quedaron a disposición del juez federal 2 de Lomas de Zamora, Juan Pablo Auge. (Télam)
