LA VÌCTIMA QUEDÓ INTERNADA
Un funcionario judicial sufrió una salidera bancaria en Morón
Un funcionario de la justicia federal de Morón fue atacado a golpes y quedó internado, en “estado delicado”, tras ser asaltado por “motochorros” que lo interceptaron y le robaron 800 mil pesos.
El atraco ocurrió cuando la víctima entró a una panadería luego de salir de un banco de zona céntrica de ese partido de la zona oeste del conurbano bonaerense.
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El ataque ocurrió cerca de las 14.40 del jueves en la panadería “Roma”, de Morón, y la víctima fue identificada como Luis René Heredia, prosecretario en el Juzgado Federal 1 de Morón.
Al tratarse de un funcionario judicial de ese fuero, la justicia federal de Morón ya solicitó el cambio de competencia para investigar la posibilidad de que la salidera bancaria no haya sido al voleo y esté vinculada a alguna represalia por el trabajo de Heredia.
Según los voceros, Heredia acababa de salir de una sucursal del Banco de Galicia situada en el centro de Morón y llegó caminando a la panadería mencionada, donde ingresó a comprar unos sándwiches.
En un video de una cámara de seguridad quedó registrado el momento en el que la víctima caminaba con la mochila, cruza la calle para entrar a la panadería y unos segundos después se observa la fuga de los ladrones en dos motos de alta cilindrada.
Los ladrones zamarrearon al funcionario hasta tirarlo al piso y le pegaron en la cabeza con lo que podría ser la culata de un arma, tras lo cual le quitaron la mochila con los 800.000 pesos que había retirado del banco.
Ángel, el dueño de la panadería donde ocurrió el asalto, contó que todo sucedió “muy rápido”.
“Justo vino un cliente a comprar, venía del banco y parece que lo venían siguiendo. Eligió unos sanguchitos, fue a la caja y cuando iba a sacar el dinero para pagar, se le arrima el delincuente lo mira a la cara y le agarra la mochila”, relató.
El panadero dijo que la víctima “por intuición agarró la mochila que tenía adelante para que no se la saquen”, pero que en ese momento el delincuente “lo empuja”, él trastabilla, y “el cómplice le da dos trompadas en el ojo que lo voltean al señor”.
“El hombre quedó tirado en el piso medio mareado y los delincuentes se escaparon con la mochila”, contó Ángel. (Télam)