Seguridad
Vecinos de Figueroa al 1100 se reunieron con autoridades ante la repetición de robos
Con la participación de alrededor de medio centenar de personas, este lunes por la noche se realizó una reunión entre los vecinos de la zona, representantes de la policía y Alejandra Marcieri, Secretaría de Protección Ciudadana. La misma se llevó a cabo luego de registrar 26 robos en menos de dos meses y con un pedido de aumentar la seguridad.
La tranquilidad para los vecinos que habitan la calle Figueroa, a una cuadra de la zona de cuarteles, se rompió hace varias semanas. El barrio lleva alrededor de dos meses siendo foco de reiterados hechos delictivos y es por eso que los vecinos impulsaron este lunes por la noche una reunión con los responsables de la seguridad en la ciudad. El cónclave se llevó a cabo en la propiedad de uno de los damnificados y estuvieron presentes representantes de la comisaría Primera, de la Tercera, el concejal Nicolás Carrillo y Alejandra Marcieri, secretaria de Protección Ciudadana.
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En medio de esta situación de intranquilidad con la que conviven todas las personas que habitan en los alrededores de la intersección de las calles Figueroa y Maritorena, Fernando Payes asumió el rol de vocero para comentar a los medios mayores detalles sobre lo que están viviendo. En diálogo con “Tandil Despierta” (104.1 Tandil FM y Eco TV) aseguró: “Desde que llegaron unos vecinos hace dos meses se dio que todos los días entran en una casa diferente”.
Justamente este vecino fue el que empezó a movilizar a todos en el barrio. El pasado 9 de septiembre su mamá sufrió un ingreso a su vivienda, reflejado en estas páginas, y a partir de entonces comenzó un trabajo diario para recopilar datos y aunar a los vecinos para tener mayor acompañamiento en un pedido a las fuerzas de seguridad. “Hay más de 20 entradas a casas y llamamos a la policía pero había que tener las pruebas. Somos un barrio laburante, no hay cámaras por ningún lado. No estábamos obsesionados con la seguridad, ahora sí”, comentó.
Usufructuando las herramientas que otorgan las nuevas tecnologías, los vecinos armaron un grupo de comunicación en una aplicación de mensajería y ahí empezaron a comunicar los más de 20 sucesos registrados durante los últimos dos meses. Según contó Payes, recabaron fotos y videos para armar un PDF con todos los hechos registrados y denunciados. Dicho informe se presentó a las autoridades en la reunión de este lunes.
La reunión
Un vecino dispuso de un espacio para realizar el encuentro del cual participaron alrededor de 50 personas. Los damnificados convocaron a todos los involucrados en el tema y los únicos que no pudieron presentarse fueron los representantes de la Usina y de la Fiscalía, siendo estos últimos los principales apuntados por el grupo organizado.
“Los de la Fiscalía no se presentaron, los más importantes. Después la policía se presentó, dijo todo lo que tienen. Hacen lo que pueden con lo que tienen. Estuvo Marcieri también”, comentó Payes que luego resaltó que en la misma noche del lunes se produjo la detención de un auto que estaría involucrado en muchos de los hechos delictivos, según los análisis de las imágenes obtenidas.
En cuanto al llamado a la gente de la Usina, informó que se realizó porque los operarios visitan con frecuencia la vivienda señalada para cortar las conexiones clandestinas. En cada uno de esos trabajos reciben constantes agresiones verbales por parte de los señalados. En ese sentido, se pudo saber que los operarios de la Usina no volverán a cortar más el suministro si no son acompañados por la policía.
De acuerdo a lo informado a este medio, los vecinos solicitaron a la policía más patrullaje en determinados horarios a lo que el jefe Departamental Landoni afirmó que iba a revisar esa cuestión. A la secretaría de Protección Ciudadana le pidieron que amplíe el sistema de video vigilancia en dos sectores del barrio. Al mismo tiempo requirieron por el acompañamiento ante la Fiscalía para poder expresar al Poder Judicial cuestiones por las que necesitan respuestas desde esa área.
Principalmente lo que se solicitó desde el costado vecinal es “volver a lo que se podía hacer antes: dormir de noche”. Son 26 casos en menos de dos meses, de los cuales hay más de diez denuncias tomadas por la policía.