Tres entidades pidieron al Banco Nación que baje las tasas crediticias para las pymes y el agro
El jueves pasado la Cámara Empresaria de Tandil (CET), la Federación Agraria (FAA) y la Sociedad Rural local acercaron una nota al Banco de la Nación Argentina manifestando su preocupación por el incremento que sufrieron las tasas de ciertos créditos para el sector agropecuario y las pymes.
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Las subas afectan directamente a estos sectores que dependen de las herramientas crediticias que ofrece el Banco para poder financiarse, resultando un impedimento más para poder atravesar la actualidad económica que los hostiga. Desde las tres entidades no tuvieron más opción que requerir que la medida de aumentos se retrotraiga a “valores más amigables”.
Según reveló el vicepresidente de la Federación Agraria filial Tandil, Dardo Alonso, la iniciativa surgió por parte de la CET y los invitaron a participar, por lo que decidieron acompañar el pedido.
Por su parte, el titular de la Cámara Empresaria, Agustín Usandizaga, contó que la carta fue presentada para enviar al directorio del Banco, pero que a la vez hicieron llegar una copia a la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (Came) para que puedan gestionar con la entidad bancaria la propuesta e inquietud de los firmantes. “Desde la Gerencia de Tandil la iban a cursar rápido porque tienen mucha presión de clientes y usuarios de las dos tarjetas, PymeNación y Agronación”, manifestó confiando en que la respuesta no tardará en llegar.
Intranquilidad y pedido
En el texto de la nota se dirigieron a la entidad bancaria nacional con la intención de hacer llegar en primer lugar su preocupación por los recientes incrementos de las tasas de interés que han dispuesto en los programas crediticios “Agro Nación” y “Pyme Nación”.
Allí manifestaron que en atención a la realidad de las pymes que pueden constatar a cotidiano, consideran que los aumentos de los últimos meses, así como también la suba ya anunciada del 55 al 65 por ciento, constituye “un golpe de gracia” para estos sectores que ya atraviesan una situación muy compleja en materia crediticia en virtud de los costos financieros vigentes a la fecha.
Sumado a la coyuntura de nuevos incrementos en servicios públicos, costo laboral por paritarias y carga impositiva en general, estos acrecentamientos en las tasas de interés no dejarían margen de acción alguno para las pequeñas y medianas empresas que, en el contexto que atraviesa el país, “requieren ineludiblemente del crédito para financiar capital de trabajo, adquirir insumos y otras necesidades que se financian con herramientas tan útiles como ambas tarjetas del Banco”.
Es a raíz de todo esto que solicitaron que se reconsidere la reciente disposición y se gestione “una pronta rebaja de las tasas respectivas” para dichas tarjetas con las que muchas Pymes se financian a corto plazo, según dijeron. De esta forma, al menos en esta coyuntura, puedan retrotraer la situación de las pymes a esquemas más amigables de tasas y desde ese complejo marco “evitar el cierre de empresas de los sectores involucrados y la consiguiente pérdida de puestos de trabajo”.