Por los ruidos molestos, varios turistas se fueron de la ciudad y pidieron el reembolso de su dinero

Los ruidos molestos generados por los escapes liberados de los autos y, en mayor medida, por las motocicletas, afectan no solamente a los tandilenses –que han alzado la voz en más de una oportunidad- sino también a los turistas, que deciden acercarse a Tandil para desconectar un fin de semana.

De hecho, desde la Asociación de Cabañas contaron que varios visitantes que habían arribado a la ciudad se fueron de sus alojamientos y pidieron el reembolso de su dinero.

“Hubo casos, sobre todo en la zona de Don Bosco, de personas que han llegadoy se han ido porque no tuvieron el silencio que esperaban. El sonido es ensordecedor, y han pedido la devolución de la seña”, clamó Walter Orsi, de la Asociación.

Asimismo, contó que muchos también optaron por elegir otros destinos y que “no vuelven más” ya que los ruidos molestos les generan un disgusto “muy grande”.

Vale mencionar que la dirección de Control Urbano Vehicular comenzó recientemente a realizar operativos incorporando el uso de un decibelímetro, herramienta que permite determinar si un auto o una moto emiten sonidos por encima del máximo permitido.