Uber en Tandil
Los taxistas piden igualdad de condiciones aunque creen que Uber afectará más a los remises
En medio de la puesta en funcionamiento de Uber en Tandil, representantes de uno de los sectores que podrían llegar a ser perjudicados emitieron su opinión. Distintos taxistas de la ciudad coincidieron que representa una competencia desleal la falta de regulaciones para los choferes de la plataforma, mientras que hubo opiniones encontradas a la hora de trabajar con ese servicio.
Hace poco más de una semana Uber irrumpió intempestivamente en la ciudad. De un momento a otro el servicio apareció disponible y los choferes que se habían inscripto en 2024, cuando se había anticipado su arribo a Tandil, quedaron habilitados en la plataforma para realizar el traslado de personas.
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Dicha situación sorprendió a los inscriptos, pero también al sector político de la ciudad que tuvo que correr de atrás sobre un escenario ya instalado y un sistema funcionando. Las charlas entre los concejales, la postura del Gobierno Local y la opinión de distintos actores de la escena se hicieron presente con puntos en común, críticas y disidencias.
Al mismo tiempo, El Eco de Tandil se puso en contacto con un grupo de taxistas para que ofrezcan su punto de vista sobre el desembarco de una plataforma que puede provocar daños colaterales a su situación laboral. De acuerdo a lo recabado hubo puntos en común en cuanto a la competencia desleal que representa la llegada de Uber, como así también diferencias a la hora de pensar la posibilidad de sumarse a la aplicación.
“Es algo desafortunado. Llevamos años de regulación, tanto los taxis como los remises, y de recompensa nos encontramos con que viene un nuevo protagonista que elude todo tipo de reglamentación”, comentó a este medio un taxista mientras esperaba pasajeros en la puerta de un mercado en San Martín al 500, donde un compañero de parada agregó: “Ellos se tienen que acoplar y aceptar lo que es la normativa, me refiero a que deban cumplir con ciertos requisitos, estaría bueno que pase eso”.
En esa misma sintonía se expresó un chofer ubicado en la parada de San Martín y Alem que también agregó, sobre el impacto negativo a la situación laboral que puede traer el comienzo del funcionamiento de Uber, ya que “desde la pandemia para acá, el trabajo viene complicado y esto la va a poner más difícil por los precios bajos que tiene la plataforma”.
Igualdad de condiciones
El principal punto de conflicto de los taxistas a la hora de la llegada de esta plataforma que ofrece una alternativa a la movilidad de las personas en la ciudad se centra en lo que consideran una competencia desleal por la cantidad de trámites al día que tienen que tener los propietarios de los taxis para poder desempeñarse.
“Hace treinta años que me dedico a esto y siempre me obligaron a tener todo en orden. Auto, licencia de conducir profesional con antecedentes policiales, modelo de auto, seguro para persona transportada. Toda la vida nos obligaron a eso y espero que sea obligatorio para ellos también”, afirmó un conductor en la parada de 9 de Julio y Pinto.
La cuestión de los seguros para transportar personas es uno de los puntos subrayados en la opinión de los distintos taxistas consultados. Uno de ellos aseguró a este medio que para ellos “es muy caro” lo que tienen que pagar y ejemplificó que un taxi de más de diez años paga casi lo mismo que un auto particular del 2024.
Este contexto es lo que muchos utilizan para explicar el poco costo que tienen los viajes en la aplicación. “Para el usuario va a ser conveniente, porque están al margen de toda la reglamentación. Al no pasar por todo eso, reflejan un precio que es ficticio y realmente la gente se ve favorecida bajo ese paragua. Te hacen un descuento cuando están al margen de todo y no pagan nada de lo que a nosotros se nos ha exigido durante muchísimos años”, aseguró uno de los taxistas.
Trabajar con Uber
Consultados por la posibilidad de trabajar con la plataforma, ya sea en simultáneo, algo que la aplicación lo permite, o realizar un pase total, las opiniones fueron dispares.
Por un lado estuvieron los de postura inquebrantable, quienes aseguraron que no lo harían e incluso se atrevieron a afirmar que si había que movilizarse para que no desembarque Uber, lo iban a hacer. Y por otro hubo posturas más contemplativas que indicaron que esperarán a ver cómo se desarrolla esta llegada.
“Para el taxista no es significativo para nada porque un viaje que te puede salir 5 mil pesos, Uber lo está pagando 2 mil. Es irrelevante, le metés muchos kilómetros al coche, hacés una buena cantidad de viajes pero cuando llegás al valor final te encontrás con el 50 por ciento o menos de lo que estamos ganando nosotros. Y con un pago diferido, porque te están pagando a la semana. En estos momentos no nos sirve”, explicaron.
Hubo quienes también aseguraron que tal vez los taxistas más jóvenes opten por esta opción pero que en los que llevan varias décadas arriba del taxi va a ser difícil. Incluso describieron que hay quienes todavía no cobran con billeteras virtuales o transferencias y se pierden viajes, por lo que descargarse y suscribirse a una app para trabajar parece muy lejano.
No obstante, también aseguraron que ya hay taxistas probando la aplicación y que confían que en un futuro, cuando se acomoda el tema de la tarifa, servirá para los taxistas como complemento ya que “nivelaría un poco el fluido de viajes para remiseros como para taxistas”.
Justamente el impacto negativo en mayor medida para el sector de remiseros es algo en el que coincidió la mayoría. Hay mucho taxista que tiene su clientela y también trabajan en la calle, con gente que va a las paradas o simplemente hacen señas para frenar uno, mientras que, según creen, la app viene a competir con el sistema de demanda que utilizan los remises.