MUERTE DE VALERIA MACHADO
La Mesa contra la Violencia insiste en que deben mejorarse los dispositivos de prevención
El espacio planteó su preocupación acerca de las condiciones en las que viven y mueren las mujeres que sufren violencia de género. "Es preciso bajar el umbral de tolerancia a la violencia, y comenzar a diseñar políticas que involucren a toda la comunidad y al Estado”, manifestaron.
Ante la muerte de Valeria Machado el pasado fin de semana en la ciudad, con suma cautela respecto de este caso puntual, la Mesa Intersectorial contra la Violencia Familiar y de Género planteó sus inquietudes acerca de las condiciones en las que viven y mueren las mujeres que sufren violencia de género.
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En un comunicado, el espacio volvió a insistir en la necesidad de mejorar los dispositivos que se implementan en la prevención, sanción y erradicación de la violencia de género desde el ámbito estatal. “Los escasos trabajos en prevención y erradicación, así como la demora en la implementación de la Ley Micaela a nivel local, nos deja con menguadas herramientas para diseñar políticas públicas adecuadas a la compleja problemática que afrontamos”, expresaron en el texto.
Desde la Mesa indicaron que la mayoría de los dispositivos de atención a quienes sufren violencia de género se activan recién a partir de la denuncia. Pero al mismo tiempo, los datos disponibles señalan que el porcentaje de denuncias –si bien ha ido en aumento- representa un escaso porcentaje de la totalidad de situaciones que se receptan en diferentes espacios sociales e institucionales. En los años 2016, 2017 y 2018 el 87 por ciento en promedio de las víctimas de femicidio no habían realizado denuncias previas, según detallaron.
“Esta constante debe alertarnos sobre el énfasis en los dispositivos que se activan a partir de la denuncia, y resaltar la necesidad de crear otros mecanismos de acompañamiento a mujeres, niñas, niños, jóvenes y disidencias que sufren violencia de género. Puede no haber denuncias, pero en el 100 por ciento de los casos de femicidios hubo alertas. Lo que nos lleva a pensar que es preciso bajar el umbral de tolerancia a la violencia, y comenzar a diseñar políticas que involucren a toda la comunidad y al Estado”, reflexionaron.
Políticas a largo plazo
La preocupación del espacio es lograr una mejor comprensión de los procesos que atraviesan quienes viven en situación de violencia de género y otras vulneraciones de derechos, así como dimensionar la importancia de implementar lineamientos que trabajen de modo integral con todos los involucrados en las situaciones de violencia. Y remarcaron que “esto supone avanzar en la creación y puesta en marcha de dispositivos de trabajo a mediano y largo plazo con varones agresores, así como consolidar intervenciones con perspectiva de género en todas las direcciones del Estado que intervienen ante situaciones de violencia familiar y de género”.
Por último, desde la Mesa contra la Violencia reafirmaron su compromiso por “construir políticas públicas con perspectiva de género que concreten acciones positivas para repensar los vínculos familiares, las relaciones amorosas y las formas de involucrarnos como comunidad en la erradicación de la violencia de género”
Frente a cualquier situación de violencia es posible pedir ayuda y cualquiera puede hacerlo. Llamar al 144 por consultas o asesoramiento, o al 101 ante una emergencia puede salvar vidas.
Magros recursos a nivel local
En Tandil, el presupuesto 2020 asignó 14.373.551 pesos a la Dirección de Políticas de Género y Diversidad Sexual a cargo de la exconcejal Matilde Vide -que funciona en la órbita de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat-, situándose dentro de los más acotados de la amplia cartera gubernamental que conforman el tejido municipal.
En porcentaje, representa apenas el 0,34 por ciento del total de fondos dispuesto para el año en curso. Para dimensionarlo, el Centro de Monitoreo recibe 90 millones de pesos -el 2,15 por ciento- para mantener las cámaras de videovigilancia y el apoyo económico a la Policía Bonaerense, por ejemplo, es de casi 16 millones de pesos.
Desde otro punto de vista, podría pensarse que si la proyección de población femenina en el partido para este año es de 71.374 mujeres, el Estado municipal destina 200 pesos por mujer para erradicar la violencia de género. Según un relevamiento, en Tandil la Comisaría de la Mujer recibe cerca de 200 denuncias mensuales en su sede y es sólo la punta de un iceberg del entramado de violencias.