El Intendente analizó la situación sanitaria y anunció que a mitad de semana Tandil volvería a Estadio Amarillo

Mientras muchos sectores de la sociedad critican al Municipio por haberse separado del sistema de fases de la Provincia y claman por poder volver a abrir sus locales, el intendente Miguel Lunghi defendió nuevamente la decisión adoptada y anunció que Tandil volverá a mitad de semana al Estadio Amarillo, cuando se cumpla una semana del anuncio de cambio de color.

Recibí las noticias en tu email

Recibir newsletter

En diálogo con el programa Tandil Despierta, que se emite por Eco TV y Tandil FM 104.1, el jefe comunal remarcó que “estamos viviendo momentos difíciles, tensos” y que la pandemia ha generado que se deba hacer frente a tres crisis: una sanitaria, una económica y una social, ya que hay gente vulnerable que a veces no puede llegar a fin de mes.

“Entonces mi compromiso es venir al despacho y trabajar día a día para buscarle soluciones a esos tres problemas, no para calentar una silla. Y no estoy peleado con la Provincia ni tampoco busco la independencia. No soy separatista. Nosotros hemos luchado por la autonomía municipal, hemos puesto en el debate que tenemos que manejarnos de otra manera, que no se pude manejar la pandemia a 375 kilómetros de distancia”, declaró.

Las postura de la comuna ha dado pie a una serie de ocurrentes y divertidos memes que circularon durante la última semana por las redes sociales. Al respecto, Lunghi evaluó que fueron una buena cuota de humor para estas épocas de inquietud: “En tiempos de desesperanza, de ansiedad y angustia, todas esas cosas que salieron por las redes, como el misil tipo salamín o los escudos, son buenas. Porque por lo menos hay un poco de alegría”.

En lo que atañe específicamente a los esquemas, explicó que el método que se utiliza en el territorio bonaerense es medir la cantidad de casos positivos de coronavirus que hay, mientras que el acuñado en Tandil lo que hace es analizar la cantidad de camas de terapia libres, el número de médicos y enfermeros que se encuentran en condiciones de atender y también la cantidad de personas con Covid-19 activos.

Destacó que gracias a este nuevo régimen pudieron actuar de manera precoz y descender al Estadio Rojo rápidamente, y expuso que con el sistema provincial recién este lunes hubiésemos bajado a la Fase 3.

“Hicimos un semáforo que es aún más restrictivo porque estamos en el territorio y podemos controlar todo. A nosotros nos votaron igual que a la gobernación y estamos para administrar el distrito”, exclamó.

Agradeció, por otra parte, el comportamiento que adoptaron los tandilenses desde que se anunció el pase a Rojo y se disculpó con todos aquellos sectores que no fueron consultados al momento de la toma de decisión: “Quiero agradecer porque desde el miércoles la gente se comportó de una forma excelente, en todo sentido. Porque de esto se sale si trabajamos en conjunto, el Estado con la sociedad civil. Y si en la vorágine del trabajo dejamos sin consultar a algunos rubros, pido disculpas, no es nuestra intención. Yo soy radical, está claro que nosotros creemos en el diálogo y en el consenso”.

Cambio a Estadio Amarillo

El Intendente anunció que la ciudad regresará al Estadio Amarillo a mitad de semana o a partir del jueves, cuando efectivamente se cumpla una semana desde que se emitió el anuncio de descenso de color.

Destacó que el regreso al estado intermedio en el nuevo sistema de semáforo “va a ocurrir esta semana, pero no quiero interferir en la decisión del Comité de Infectología porque no me corresponde”.

Si bien Provincia posicionó este lunes a la ciudad en Fase 3, con lo cual en el régimen bonaerense se mantendrá en ese lugar hasta la semana próxima, Lunghi aseveró que la ciudad continuará rigiéndose por el nuevo esquema y que serán los profesionales quienes determinarán día a día el estado de Tandil.

“Nosotros nos vamos a regir por el semáforo. Este es el camino de Tandil. Yo le he dicho eso a (jefe de Gabiente, Carlos) Bianco y él me ha dicho que sigamos así, que ellos van a seguir su camino, y está bien”, explicó.

Cabe recordar que los profesionales de la salud que integran el Comité de Seguimiento del Covid-19 en la ciudad de Tandil determinaron el pase a Estadio Rojo por el brote de casos en dos geriátricos y por la falta de disponibilidad de camas en la Clínica Chacabuco, ya que varios enfermeros habían dado positivo.

Al respecto, Lunghi informó que “el personal ya está recuperado, faltan muy pocas enfermeras volver; calculo que para el martes estarán todas trabajando. Ya han cumplido sus días, se están hisopando y están dando negativo”.

Agregó que en la Chacabuco hay cinco camas de terapia vacías, como así también hay otras tantas en el Hospital Ramón Santamarina, por lo que no dudó en afirmar que seguiremos teniendo el virus en la ciudad pero que el sistema no va a colapsar.

“Lo que pasa es que al bajar esas 20 camas y tener un cuello de botella de dos geriátricos infectados, que por suerte finalmente los contagios fueron mínimos, enseguida apretamos el botón rojo por si esa gente mayor tenía problemas con el Covid-19 y teníamos que internarlos”, contó el Intendente y enfatizó: “Por eso salimos de las fases, ¿por qué tenemos que esperar una semana si nosotros podemos frenar antes el problema?”.

Análisis de las muestras

Luego de que el Instituto Nacional de Epidemiología “Dr. Juan H. Jara” (INE) confirmara que no procesará muestras de pacientes ambulatorios derivadas por efectores de salud privados ya que se resolvió priorizar la de personas internadas y/o personal esencial, en Tandil comenzaron a buscar la forma de poder analizarlas de manera local.

Ya el vicepresidente del Sistema Integrado de Salud Pública, Matías Tringler, había anticipado a este medio que el Municipio buscaba acelerar la firma de un convenio con la Unicen para ampliar la cantidad de muestras procesadas por día.

Este lunes, el jefe comunal resaltó que ya acordaron los valores y que el laboratorio de la Universidad, que venía procesando muestras los martes, jueves y viernes, ahora comenzará a hacerlo de lunes a lunes.

Explicó Lunghi que, según les manifestaron, lo que ocurrió en el INE fue que se rompió un instrumento, lo que ocasionó que se juntaran un sinnúmero de muestras. No obstante, destacó que las que quedaron pendientes ya no se pueden traer de vuelta, de modo que deben esperar a que sean estudiadas.

Empero, refirió que en el transcurso de la semana se irán estabilizando los resultados pendientes, ya que el laboratorio de la Unicen procesará alrededor de 210 casos por semana.

Lógicamente, este cambio significará un importante desembolso económico para el Municipio ya que el análisis en el Instituto de Mar del Plata era gratuito. De cualquier forma, el Intendente destacó que no escatimarán en gastos en salud en esta pandemia y comentó que aún está pendiente la posibilidad de procesar las muestras también en laboratorios privados: “Vamos a ver cómo avanza la Universidad día a día. Si podemos ir compensando todo lo nuevo y el INE termina de procesar lo que ya tiene, no tendremos problemas. Pero si se genera otro cuello de botella, ahí haremos algún contrato con los privados como corresponde”.

La importancia de una política de salud

Si bien el 20 de marzo, cuando se decretó la medida de aislamiento social, preventivo y obligatorio, las autoridades nacionales anunciaron que se hacía en pos de fortalecer el sistema sanitario para evitar un colapso, lo cierto es que mucho no se ha modificado.

En ese aspecto, Lunghi señaló que “ha mejorado” pero que en tres o cuatro meses no se puede poner en orden un sistema si no hay una política de salud pública que lleve 30 ó 40 años con un rumbo fijo.

“Pero no hay y no había un sistema de salud de primer nivel en todo el país. Hemos hecho parches a partir de marzo en toda la Argentina. En Tandil, igualmente, no hemos tenido que poner para nada porque hace 17 años que venimos derivando todos los tandilenses el 26 por ciento del presupuesto para el crecimiento y las mejorías en salud. De dos hospitales que había cuando yo ingresé a la administración pública, hoy tenemos cinco y más de 200 camas, cuando antes había alrededor de 110 ó 120”, remarcó.

Manifestó que el sistema sanitario de la ciudad es muy bueno y está en capacidad de atender a los ciudadanos, pese a no estar preparado para una pandemia. En cambio, indicó que el problema a nivel nacional es el faltante de recurso humano: “Podés comprar cualquier cantidad de respiradores y de camas, pero no tenés terapistas. Nadie puede intubarte si no hay anestesistas y terapistas. Y los recursos humanos no se preparan en cuatro meses, no nos engañemos. Las terapias no se hacen en cuatro meses, aunque tengas plata, lleva su tiempo, como todo”.

Bajo su punto de vista, todos aquellos que se reciben en universidades públicas deberían tener que elegir entre las especialidades que le faltan al país: “La Argentina tiene que tener una ley nacional que regule las especialidades, no todos podemos ser clínicos. Y lo digo con respeto. Un país prolijo y ordenado va buscando sus necesidades y diciéndole al profesional que se recibe y que tiene que hacer la residencia obligatoria que tiene que estudiar lo que falta. Porque acá hay otro problema, aparte de faltar, los pocos que hay se contagian y te quedás con el aparato solo”.

Agregó que la enfermería es una especialidad a la que nunca se le dio la trascendencia necesaria en el país y que uno de los que más se preocupó fue Arturo Illia, ya que fijó un precio máximo a los medicamentos.

“Acá nos preocupamos por la alimentación, que es fundamental, pero antes te morías a los 40 ó 50 años, y ahora a los 75 ó 76. Y eso es por la ciencia y la medicación”, resaltó y completó: “Pero la gente no puede ir a la farmacia a comprar. No tenemos una ley de medicamentos. Los diputados estudian cualquier tipo de normativa que después no se pone en vigencia. Y esto lo digo para todos los partidos, hay que alimentarse bien, pero también los ciudadanos deben tener la posibilidad de tratarse con medicamentos”.

Para apoyar aún más su postura, informó que si alguien hoy tiene un problema oncológico, una ampolla cuesta alrededor de 50 mil pesos.

Personal médico contagiado

Consultado acerca de la gran cantidad de personal de la salud que se ha contagiado en la ciudad, el Intendente explicó que “no falló nada” y que simplemente aconteció lo mismo que en el resto del país, aclarando que los médicos son los que más contacto tienen con el virus.

“Acá ninguna de las tres instituciones que trabajamos en conjunto ha dejado de comprar todo lo que debe para que los trabajadores estén en condiciones de cuidar y de hacer los estudios que tienen que efectuar a quienes se acercan”, expresó.

Señaló que cuando explotaron los casos en el Gran Buenos Aires “las esquirlas llegaron al interior” y que eso era lo que desde un primer momento habían previsto: “Nunca estuvimos exentos de que el virus entrara. Y cuando estalló el conurbano, donde hay muchas industrias, nos llegó. Acá, a pesar de controlar los ingresos, muchos se han pasado y no los hemos podido parar”.

“Hemos trabajando bien en algo que no conocíamos, y vamos a seguir haciéndolo. Y estoy emocionado por el comportamiento de los tandilenses. Hay muchos con problemas económicos, y así y todo están cumpliendo muy bien. Esperamos que esto del semáforo sea ágil y podamos darles la movilidad que necesitan. Y por supuesto, que al cambiar de color, la gente se siga comportando de la misma manera que lo hizo desde el miércoles”, complementó.

Represalias por salir del sistema de fases

Ante todo, como lo han hecho en reiteradas oportunidades desde el Ejecutivo, el Intendente remarcó que la medida adoptada no fue para enfrentarse con Provincia y que, en lo que a él respecta, está abierto al diálogo, pese a que no ha vuelto a tener contacto con las autoridades bonaerenses. “Indudablemente, cayó muy mal la posición que tomamos en Tandil”, sostuvo.

Como argumento para su razonamiento, trazó una analogía con lo acontecido en Olavarría, ciudad que el Gobierno de Buenos Aires ubicó en Fase 4 este lunes pero que “está igual que Tandil”.

“Por eso tomamos estas decisiones; tenemos realidades muy parecidas pero estamos en distintas fases. Entonces a eso me refiero cuando digo que hay que darle autonomía a los jefes comunales”, expresó Lunghi y se preguntó: “¿Cuál es el daño que le puede hacer a la Provincia que los intendentes podamos manejar con seriedad y tomar decisiones?”.

En tanto, respecto a las posibles sanciones que podría aplicarle al Municipio, Lunghi fue claro: “Si las represalias caen, que lo hagan sobre el Intendente, que no perjudiquen a la ciudad. El pueblo de Tandil no tiene que ser sancionado. Si quieren hacer algo, que lo hagan con mi persona”.

Tres lugares de aislamiento

Actualmente, el partido cuenta con tres diferentes lugares -el Campus, Pinar de las Sierras y un hotel- para que las personas que hayan contraído el virus y no necesiten ser internados, se puedan aislar para no poner en riesgo a sus allegados.

“Al que es Covid-19 positivo leve, que no necesita internación, lo estamos aislando en esos lugares para que se recupere sin ningún problema. Se han hecho convenios con la Universidad, de forma gratuita, y también con el Pinar de las Sierras, y vamos a ir llevando gente que tenga que aislarse para que no contagie al resto de la familia y para que pueda pasar los 14 días en un lugar aceptable y que esté en condiciones”, declaró.

Finalmente, reveló que tienen ofrecimientos de varios hoteles y otros lugares, pero evaluó que, por el estado sanitario de Tandil y por el comportamiento de los ciudadanos, no será necesario.