El Colegio de Abogados de Azul suspendió provisoriamente la matrícula del abogado Castaño
Es por la causa por la que está acusado de “Abuso sexual con acceso carnal” por la cual deberá someterse a juicio. La decisión tomada por el Consejo fue comunicada de forma "inmediata" a los diferentes órganos judiciales.
El consejo directivo del Colegio de Abogados de Azul decidió decretar, por unanimidad, “la suspensión provisoria de la matrícula del doctor Claudio Castaño, conforme a lo dispuesto por el artículo 26 de la Ley 5177 mientras dure la situación procesal que motivó la presente resolución”.
Recibí las noticias en tu email
La decisión se tomó el pasado martes 27 de noviembre y el abogado fue notificado en su domicilio legal al día siguiente, por lo que la medida está en vigencia. Será cuestión de tiempo saber si Castaño apelará ante una instancia superior, en este caso el Colegio de Abogados de la Provincia de Buenos Aires, para tratar de frenar la suspensión que desde el miércoles pasado está en marcha.
La situación procesal a la que refiere el Colegio de Abogados y por la cual se suspende la matrícula de Castaño es la causa por la que está acusado de “Abuso sexual con acceso carnal”.
Como oportunamente se informó en estas páginas, para el Ministerio Público el 11 de julio de 2016, momentos antes de las 22, el letrado abusó de un joven. Para ello, previo citarlo en su domicilio sito en calle Alem al 500, el imputado le manifestó “vení vamos a hacer algo entre nosotros, vamos a la pieza a estar más cómodos, vamos a ver una película a la cama” y ante la inequívoca oposición de la víctima, el acusado lo tomó de sus brazos conduciéndolo al dormitorio donde, tras el uso de la fuerza, lo violó.
En su momento, Castaño buscó poner en crisis la denuncia y la credibilidad del denunciante, pero los profesionales intervinientes consideraron a priori como verosímil el relato de la víctima.
Considerandos
Resulta vital para el análisis de la sanción impuesta por el Colegio de Abogados de Azul el artículo 26 de la Ley 5177 que señala: “Sin perjuicio de las facultades disciplinarias que se le otorgan al Tribunal de Disciplina, el Consejo Directivo podrá decretar la suspensión provisoria en la matrícula a aquellos profesionales que se encuentren imputados por delito doloso. Dicha suspensión sólo podrá decretarse con el voto de las dos terceras partes de los miembros del Consejo cuando la gravedad del delito y la verosimilitud de las pruebas así lo acrediten, y por simple mayoría cuando exista acusación fiscal”.
En el caso puntual de la causa contra el abogado en cuestión, el letrado está imputado por delito doloso, por lo que el Consejo Directivo del Colegio de Abogados de Azul, compuesto por 12 profesionales, decidió tras un largo y extenso debate la suspensión provisoria de la matrícula.
Pero no es el único artículo que tuvieron en cuenta ya que fue importante para que se concrete la medida el inciso 4 del artículo 6 de la mencionada normativa que específica que “el abogado que quiera ejercer la profesión presentará su pedido de inscripción al Colegio Departamental del que formará parte” y deberá “declarar su domicilio real, y el domicilio legal en que constituirá su estudio y servirá a los efectos de sus relaciones con la Justicia y el Colegio”. Por lo tanto, al notificarse al día siguiente de la decisión del Colegio en el domicilio legal de Castaño, la suspensión entró en vigencia.
Causas
Vale la aclaración por lo mediático que ha resultado su presencia en el último mes: no se está haciendo juicio de valor ético sobre la actuación del letrado, sino lo que está decidiendo el Colegio de Abogados de Azul es en base a la causa que está en contra de Castaño y por la que irá a juicio. No tiene que ver la decisión con el caso Jorge Bustamente ni con la defensa del femicida de Ailín Torres, por citar los dos últimos casos donde tuvo implicancia.
Sin embargo, no deja de llamar la atención que dicha sanción preventiva ejecutada verse sobre un suceso que data de mucho tiempo atrás (a mediados de junio del año pasado el Juzgado de Garantías elevó a juicio la causa) y por el cual se aguarda el debate en los estrados azuleños en agosto del año próximo.
En tanto, las causas que llevaba adelante, no las puede ejercer más. Los particulares que lo contrataban deberán conseguir otro abogado y en el caso de temas penales, se podía hacer cargo la propia Defensoría Pública.