Dos franceses en Tandil cuentan cómo esperan el choque clave ante Croacia

Griezman, Pogba, Mbappé, Giroud, Pavard, Kanté, Matuidi, Umtiti… algunos de los nombres que resuenan hace varios días en la cabeza de Pauline Ameglio, de 26 años, y de Lionel Cassar, también de la misma edad. Son dos franceses que viven hace algunos meses en Tandil y que hoy palpitarán de una forma especial la final que su país juegue contra Croacia en el Mundial de Rusia 2018.

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La selección dirigida por el excampeón del mundo, Didier Deschamps, ha demostrado sus credenciales para quedarse con el trofeo a lo largo de todo el torneo. Arrancó con un triunfo ante Australia por 2-1 y siguió con una victoria por la mínima diferencia ante Perú. Después fue un empate ante Dinamarca. Después fue el turno de unos octavos de final que Argentina recordará durante muchos años porque Francia derrotó al seleccionado nacional de Jorge Sampaoli por 4-3 dejando en el camino al equipo de Messi y compañía. El partido puso en escena a un joven que se ha llevado todas las miradas durante la competencia: Kylian Mbappé, de tan solo 19 años, jugador del PSG. En cuartos el trámite ante Uruguay fue sencillo y pasaron por 2-0. Más difícil fue Bélgica, a la que le costó derrotar por 1-0.

Pauline, es de Vichy, una ciudad del centro de Francia. Estuvo seis meses de viaje por toda América latina, recorriendo diferentes países, entre ellos Argentina. Allí se familiarizó con el lenguaje y las costumbres de la zona. En Perú, en un bar, conoció a Lucas Benítez, su actual pareja, y tras un primer viaje a Tandil, desde enero de este año están viviendo juntos.

Esta joven de 26 años es psicóloga y tramita hace varias semanas la validación de su título para ejercer en el país. Mientras tanto es acompañante de abuelos de los que aprende también de la cultura local.

Lionel en tanto tiene una historia que lo cruza con Argentina, y en particular, con la ciudad. Su madre nació en Tandil y luego se fue a vivir a Francia. Allí, en París, fue donde nació y se crió. Ahora este joven de 26 años, egresado de la carrera de managment, hace seis meses vive en la ciudad en la casa de sus abuelos. Cuando llegó tuvo un paso por una cervecería como mozo y ahora da clases de francés.

“La ciudad me parece linda y tranquila. La sierras son hermosas”, señala Lionel y Pauline también asiente y agrega: “Es un lugar muy lindo, parecido a donde vivía yo”.

Vivir el fútbol

Si hay algo que caracteriza a los argentinos es su pasión por el fútbol. Es complejo para explicar cómo se vive cada partido de los clubes por los cuales se simpatiza, de igual modo que con las presentaciones en un Mundial del seleccionado nacional.

“Están locos acá con el fútbol”, dice Pauline. “Allá es muy diferente cómo se vive”, resalta al tiempo que explica que si bien le gusta el fútbol, lo suyo es el rugby.

Lionel explica que a él le gusta el fútbol. Fue a varios partidos que disputó el PSG por la liga local y también a la Copa de Campeones de Europa. “Acá es mucho fervor, a todas las personas les gusta. Allá son solamente los jóvenes los que siguen los partidos, diría entre los 15 y 25 años, después ya se pierde esa pasión”, afirma. “Es verdad”, añade Pauline al relato: “Acá lo sufren todos, incluso las mujeres y los más grandes, cosa que en Francia no pasa”.

De igual modo, Lionel señala que se está viviendo con mucho entusiasmo la participación del equipo galo en Rusia: “Los veo a mis amigos a full, igual que cuando hace dos años jugamos la final de la Eurocopa que perdimos con Portugal”.

El partido con Argentina

Sin dudas el sábado 30 de junio no fue un día más para Lionel y Pauline. Su selección nacional jugaba contra Argentina y el que perdía armaba las valijas y se iba a casa. La historia es conocida.

“Yo grité el primer gol de Francia, me miraron mal y después no grité más”, dice entre risas Pauline que reconoce que luego tenía “sentimientos compartidos”.

El caso de Lionel es diferente: “Yo siempre simpaticé por Argentina, es algo que desde chico hago. Fue particular el partido. Igual sabía que si pasaba alguno de los dos podía seguir viviendo el Mundial”.

La final

Desde las 12 del mediodía, Francia y Croacia disputarán la final de la Copa del Mundo de Rusia y una de las dos selecciones se coronará campeona.

Las cábalas quedan para los argentinos. Éstos dos jóvenes franceses no tienen ningún “rito especial” para vivir el partido más importante del año. “Me levanto y espero la final entre mates con mi familia”, dice Pauline. “Será cuestión de esperar y mirar el partido”, asegura en tanto Lionel.

“Esperemos que ahora todos hinchen por Francia”, pide Pauline. “Si ganamos será un domingo de fiesta hasta altas horas en las ciudades de nuestro país”, reconoce Lionel.