Demandaron acciones urgentes para afrontar la crisis en el transporte

El estado de emergencia que atraviesa el transporte público de pasajeros de Tandil sumó un nuevo capítulo. La advertencia sobre el posible cierre de dos empresas producto del déficit que arrastran mantiene a la Comisión de Transporte del Concejo y al Ejecutivo en  busca de medidas a implementar para atender la problemática.

En simultáneo, la Cámara de Transporte presiona para que las medidas se adopten de manera rápida “porque en esta crisis del transporte los tiempos se acortan mucho”, señaló el presidente de la entidad, Daniel Albanese.

En diálogo con el ciclo radial Último Bondi (104.1 Tandil FM y EcoTV) el dirigente salió a sentar su postura, insistió con el reclamo y trazó un preocupante diagnóstico sobre la realidad de las empresas que tienen a cargo la concesión del servicio público, que arrastran un déficit millonario a partir de la caída de los subsidios entregados por el Gobierno nacional y del incremento en el precio del combustible y de los insumos, en similares términos a lo ya conocido y analizado en los últimos cuatro meses.

Como se informó en la edición pasada, el martes hubo un encuentro en la Comisión de Transporte del Concejo Deliberante que reunió a los titulares de las seis empresas a cargo del sistema y a los representantes de la entidad con integrantes del espacio legislativo que preside el radical Juan Salceda.

El planteo giró en torno a la situación de la Línea 502 (blanca) de la empresa Transporte La Nueva Movediza SA, que dejaría de cumplir con los recorridos debido a dificultades económicas. 

En tanto, la firma Transporte 9 de Julio de la Línea 500 (amarilla) extendería su funcionamiento por dos meses en función del margen de recursos disponibles.

El intercambio entregó momentos de tensión, en medio de cuestionamientos y acusaciones sobre las responsabilidades que llevaron al estado actual del sistema público concesionado. 

El diálogo finalmente avanzó al abordar la propuesta de declarar la emergencia en el transporte, en un enfoque que contemplaría una serie de medidas que alivianarían la situación de las empresas frente al actual contexto macroeconómico agravado por la caída del Fondo Compensador que distribuía el Gobierno nacional.

“Cuestión de tiempo”

En primer lugar, Albanese reconoció que durante el encuentro en el primer piso de la Municipalidad, los transportistas plantaron los alcances de la “crisis profunda” que atraviesa el sistema, no sólo como un fenómeno local sino también a nivel nacional, junto con “la necesidad que encontremos alternativas” para afrontar un “déficit permanente” que arrastran las empresas desde diciembre.

La devaluación, la “desaparición” del Fondo Compensador y el aumento del combustible llevaron a una pérdida de recursos que “nos está asfixiando al punto tal que empieza a poner el riesgo la operatividad de algunas empresas”. Es “cuestión de tiempo” para que la totalidad de las firmas afronte las mismas dificultades.

Ante el poder concedente

Entonces, Albanese ratificó que se presentaron en el Concejo Deliberante “porque es el poder concedente”, según lo que fija la Ley Orgánica de las Municipalidades y la Ley 7.476, y es el que “tiene que garantizar los recursos y hacer que el servicio sea sustentable”.

Si bien es un servicio público concesionado, “depende del Estado”, que “es el que tiene que dar las herramientas y garantías para que pueda prestar. Fuimos a buscar respuestas y no las estaríamos encontrando”.

Sobre la discusión, ratificó que el transporte es municipal y que, por ese motivo, “vamos al poder concedente”. No obstante, reconoció que el sistema recibe aportes del Gobierno nacional y provincial para su funcionamiento.

A más datos, el dirigente resaltó que el subsidio nacional “desapareció”, el último pago ingresó en diciembre, mientras que los recursos que gira la administración bonaerense “se mantienen a valores históricos”, por lo que, en medio de un contexto inflacionario “se ha licuado y ya no cubre ni el 50 por ciento de lo que cubría el año pasado”.

De todos modos, insistió que “el primer escalón de todas estas responsabilidades es el Municipio, que es el poder concedente”.

Declarar la emergencia

Frente a este escenario, la entidad presentó a los concejales un pedido concreto para que evalúen la declaración de la emergencia en el transporte público para habilitar al Ejecutivo a la implementación de herramientas “más expeditivas” a la toma de decisiones.

“Menos tarifas, todo el resto lo podría manejar el Ejecutivo”, ejemplificó Albanese sobre los alcances de la medida, que tendría como objetivo agilizar los procesos ante la urgencia.

Asimismo, observó que “siempre hacemos propuestas, nunca vamos a buscar tarifas como única alternativa”, y citó la idea para crear una tasa que genere recursos para el sostenimiento del servicio y la implementación de la figura del pasajero frecuente.

A más detalles, hizo referencia a un estudio presentado ante las autoridades comunales que refleja la tasa de uso de los recorridos  y alargues que puso en marcha la nueva concesión.

La entidad propuso que, en algunos casos, la necesidad de contar con menor cantidad de frecuencias “porque la demanda no requería tanta cantidad de servicios”, según lo que reflejó el relevamiento de los últimos 12 meses. 

Y adelantó que “queremos ajustar la cantidad de servicios” para que se adecúen a la demanda de los usuarios. “No tiene sentido ir a un recorrido y que vuelva vacío porque no hay demanda”, planteó y expuso el caso de la extensión a la rotonda de Calihue, que “no tiene tasa de uso”.

“Se empezó con un número de servicios tentativos, ahora después de un año tenemos medidas las necesidades de los usuarios”, destacó.

Otra realidad

En declaraciones radiales, el titular de la entidad que nuclea a las seis empresas que prestan el servicio en Tandil analizó las características del sistema, el funcionamiento y la concesión, a la vez que insistió en el impacto que tuvo el escenario actual a partir del cambio de gobierno.

En esa línea, apuntó que la firma del nuevo contrato de concesión se concretó en mayo pasado, en un “contexto muy muy distinto”.

“Estaba pensado y armado sobre distintos parámetros y hoy es totalmente distinto. Despareció el Estado nacional, se produjo una devaluación del 118 por ciento, los insumos se duplicaron y triplicaron su valor en muchos casos”, repasó.

En definitiva, enfatizó que “se complicó absolutamente todo”, en un cambio a  “otra realidad” con “perspectivas distintas”.

El Acuerdo del Bicentenario y las propuestas no implementadas

En otro pasaje de la entrevista radial, Albanese hizo alusión al rol que cumplió la entidad que preside en el marco de las mesas de discusión del Acuerdo del Bicentenario, el espacio creado por el Municipio en 2018 con el objetivo de generar políticas públicas mirando los 200 años de la ciudad.

La Cámara de Transporte participó de las reuniones del eje movilidad urbana, donde impulsó “un montón” de propuestas vinculadas a la materia poniendo el foco en desalentar el uso de los autos y promoviendo la utilización del transporte público.

Las iniciativas fueron “aceptadas y apoyadas” por las instituciones que formaron parte del ámbito de discusión, “pero ninguna se llevó a la práctica”.