Advirtieron que los sistemas de salud público y privado están al límite, con ocupación de camas casi total
El Comité Epidemiológico alertó sobre la criticidad sanitaria por la que está atravesando Tandil. La misma situación se repite en otras ciudades y coarta la posibilidad de derivación de pacientes, en caso de que se requiera. En el SISP la terapia está completa y se internó al primer paciente en el Hospital de Niños. Mientras tome ritmo la vacunación, pidieron extremar rotundamente los cuidados e hisoparse ante el mínimo síntoma.
Ayer por la mañana el Comité de Seguimiento del Covid-19 en Tandil brindó una nueva conferencia de prensa en el SUM del Hospital de Niños para advertir sobre la gravedad de la situación epidemiológica de la ciudad y pedir que se extremen los cuidados.
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Las autoridades del Sistema Integrado de Salud Pública (SISP), Gastón Morando y Matias Tringler, junto a la directora del Hospital de Niños Debilio Blanco Villegas, Manuela Beazley; y el médico infectólogo, Jorge Gentile, informaron que la ocupación de camas en todos los centros de internación está al límite y que el lunes se internó al primer paciente con coronavirus en una de las plazas para adultos que habían dispuesto en la Terapia Intensiva del Hospital de Niños.
En este marco, avanzan en inversiones para obtener más aparatología, mientras que ya han adquirido dos respiradores y anticiparon que seguramente conseguirán equipos de alto flujo. Además, como desde un primer momento, están optimizando los recursos existentes tanto en el Hospital público como en la gestión con los privados, programando el traslado de Maternidad y Neonatología a la Clínica Chacabuco.
Aseguraron que la salida es la vacunación, pero que mientras tome ritmo se necesita imperantemente de la responsabilidad individual. La clave, dijeron, sigue siendo testearse ante la presencia del mínimo síntoma, para detectar los casos a tiempo, asilarlos y así cortar la circulación.
Evolución de casos
Gastón Morando inició la conferencia y, en primer lugar, puso sobre la mesa que tanto la gestión del SISP como de los privados están al límite, y la evolución reciente de los pacientes en sala grafica la situación.
Precisó que en la última semana el aumento de contagios fue del 19 por ciento, lo que resulta positivo porque en cierta forma se detuvo esa curva que se venía disparando en un ciento por ciento, aunque igualmente consideró que la cantidad de casos sigue siendo alta.
“Mientras avanza como esperamos el esquema de vacunación, necesitamos que los ciudadanos reduzcan la circulación y cuiden a los grupos de riesgo”, exhortó el presidente del SISP, rogando se extremen los cuidados.
El sistema público, completo
“Necesitamos bajar la curva de contagios para que nos dé respiro”, aseveró Matías Tringler, que posteriormente confirmó que el SISP tiene la terapia ocupada al ciento por ciento.
El médico detalló que la sala de cuidados intermedios prácticamente se ha convertido en intensiva, mientras que el piso de Clínica Médica tiene a tres pacientes con el sistema de alto flujo. Además, ya debieron comenzar a hacer uso de las camas dispuestas en la terapia del Hospital de Niños para pacientes con Covid-19, ya que el lunes internaron allí a la primera persona.
Resaltó que la situación es realmente crítica y enfatizó, entonces, la importancia de seguir utilizando la herramienta de hisopados espontáneos disponible en el Hospital Santamarina, que viene dando buen resultado. Así, pidió que ante la aparición de cualquier síntoma no duden en realizarse el testeo, ya que de esa manera se obtiene un resultado precoz y el consiguiente aislamiento para cortar la circulación.
Saturación local y zonal
Los referentes del Comité advirtieron que esta coyuntura es mucho más compleja que los picos registrados en octubre del año pasado y en enero pasado, ya que a diferencia de aquellas veces la situación límite coincide en las tres instituciones médicas de la ciudad. Así, el Hospital, la Clínica Chacabuco y el Sanatorio Tandil tienen ocupación de camas casi total.
Además, Tringler planteó que se agrava aún más si se tiene en cuenta que el resto de las ciudades está pasando por lo mismo, lo que dificultaría la posibilidad de trasladar pacientes. En este sentido, contaron que han tenido pedidos de otras localidades para trasladar personas. Entonces, así como no se puede recibir, tampoco se podrá enviar.
Por su parte, la directora del Hospital de Niños, resaltó el trabajo colaborativo para poder dar respuesta a la demanda que está planteando la pandemia al SISP.
Asimismo, la doctora Beazley consideró que la pandemia ha dejado “un poco de lado a los pacientes pediátricos”, y por eso informó que desde la guardia de ese nosocomio atenderán a personas de hasta 18 años para dar lugar a todos los que requieran atención y liberar la guardia del Santamarina.
Finalmente, Gentile volvió a señalar la necesidad de adecuarse a la circunstancia, “resistir y comportarnos para que esto no se incremente más de lo que está”.
El “minuto a minuto” para evaluar nuevas restricciones
La Provincia sigue estableciendo a Tandil en Fase 3, siempre con la posibilidad de que el Intendente solicite el cambio de estadio e, incluso, permitiendo que apliquen restricciones más fuertes.
Considerando la situación que revelaron los integrantes del Comité de Seguimiento del Covid-19 a nivel local, y consultados ante la posibilidad de endurecer las medias, el vicepresidente del SISP indicó que están expectantes y evaluando el “minuto a minuto”.
Según contó Matías Tringler, actualmente la atención está en constatar si se continúa la propensión de la semana pasada, de un crecimiento mucho menor a la anterior, respondiendo a las actuales restricciones.
“En estos días realmente se va a evaluar si esto es una tendencia sostenida o no”, anticipó, y agregó que permanentemente se analiza la opción de, en cualquier momento, disponer más limitaciones.
Con respecto a lo escolar, garantizó que siempre tratarán de cuidar la presencialidad, ya que saben que el índice de contagios, y sobre todo de brotes, no es significativo dentro de las burbujas o agrupamientos.
“Los protocolos en las escuelas evidentemente sirven, es un sistema que está funcionando bien y que está medido. Además, a diferencia de las grandes ciudades aquí el uso de transporte público no es tan masivo”, planteó, esperando que si hay nuevas determinaciones no vayan para ese lado.
Por el contrario, consideró que las medidas deberían inclinarse más a coartar los movimientos o revisar la actividad laboral en general, pero sobre todo las reuniones sociales. Con la intención siempre de no perjudicar la actividad económica, que admitió tan importante como la salud hoy en día, también puso relevancia en no afectar la escolaridad que es importante y salud a la vez.
“Lo primero que necesitamos es que la gente tome conciencia de la gravedad de la situación y eviten juntarse por fuera del grupo conviviente”, insistió Tringler, motivando que es por unos días, hasta que se logre bajar la cantidad de contagios y desagotar los centros de internación.