Rodolfo Valerio cuenta su presente

Confiesa que superó la etapa de bajón, luego de que ?joderse? la rodilla derecha y ocho semanas de rehabilitación le hayan cortado un buen momento estando en las inferiores de Arsenal de Sarandí. ?Estaba muy bien, pasé buenos momentos allá, pero la lesión me jugó en contra porque cuando volví el técnico no me estaba dando mucho lugar y opté por volverme a Tandil?, cuenta y agrega que en Santamarina lo recibieron ?bárbaro?. Luego acusa como principales culpables de su recuperación física al kinesiólogo Fernando Pulido y a Diego Colantonio, profe del CET (Centro de Entrenamiento de Tandil).
La nota con www.eleco.com.ar se realiza con Pablo Calvo como testigo, ?arquerazo de la Alianza Sanjo /Excursio?, dice Rodo.
¿Estás para el Argentino ?A??
-Sí, estoy con muchas ganas y el lunes hice fútbol para los titulares. En la era del Tano Pernía concentré pero nunca me tocó jugar. Eso fue antes de irme a Arsenal.
-¿Y te ves debutando el domingo ante Cipolletti de Río Negro?
Ojalá. El otro día me pusieron como doble cinco junto a Emmanuel Giménez, así que estoy con muchas ganas. Igualmente estoy convencido de que vengo haciendo las cosas bien y si sigo así, tarde o temprano voy a tener mi chance.
-Qué clásico ganaron el otro día?
-Sí, buenísimo. Y eso que somos todos pibes (enumera uno por uno la categoría de cada compañero). Fíjate que el más chico es Paco (Kurger) y bueno, el Mono Ijurco, después somos todos pibes. Se ganó bien.
-¿Tenés pensado volver a Buenos Aires, en algún momento, a probarte una vez más?
-Yo ahora estoy muy bien, en un buen momento, pero sí, quiero volver.
-¿Cómo viviste ese momento tan delicado que deparó en la ida Mario Finarolli, cuando el plantel fue a Multimedios El Eco a hablar por radio y demás?
-Nosotros, lo más pibes no sabíamos bien qué hacer. Charlábamos con los más grandes y tratábamos de acompañar, lo único que le pedíamos es que no nos comprometan a nosotros, porque yo soy pibe y quiero jugar. Fue un momento delicado del cual se aprende mucho y la verdad que los más grandes nos trataron bien. Lo Tártaro es un ejemplo, nosotros siendo tan jóvenes veíamos como el tipo contagiaba entusiasmo y se mataba entrenando a su edad. De la vez que fuimos al Multimedios recuerdo que yo estaba y lo único que pensaba es, ?que no me pregunten nada a mí?, porque no sabía que decir (risas).
-¿Hacés algo más aparte de jugar al fútbol actualmente?
-Ayudo a mi viejo (Rodolfo) que es maestro mayor de obras y construye casas de campo, lo acompaño, hago trámites y mandados, más que nada para colaborar y hacer algo más. Y, bueno, estoy terminando la secundaria.
Rodo tiene cuatro hermanos, Pamela (24 años, estudia para contadora en nuestra ciudad) y Florencia (estudia Derecho en Azul), luego vienen Rodrigo (clase 91´) ?juega de nueve como lo hacía mi viejo? y Nicolás, ?que es clase 92´ y juega de dos?. Ambos se desempeñan en Santamarina, ?pero el que más seriamente de los tres se toma al fútbol soy yo?, admite.
-Y tus viejos chochos que te volviste, ¿no?
-Mamá (Marta) más o menos, porque la hago renegar mucho, je.
-¿Te costó readaptarte a Santamarina?
-Gracias a Dios no, me conocían los chicos y los profes y me recibieron muy bien.
-¿Creés que se puede pelear por ascender con las complicaciones que tiene el club?
-Sí, porque se está laburando muy seriamente y hay muy buenos jugadores.
–Contame algo de Duillo Botella, ¿es importante para este nivel que estás mostrando hoy en día?
-Sí, me conoce de chico de cuando en inferiores yo jugaba en contra de sus equipos y en el 2004 llegó al club y lo tuve como técnico en sexta y primera y salimos campeones en ambas, año 2004 y 2005.
-¿O sea que te está dando mucha confianza?
-Sí, sí, obvio. El plantel en general está muy bien porque él y el cuerpo técnico laburan bien, son serios en lo que hacen. El profe Facundo De la Piedra , planifica muy bien la semana y eso motiva.
-¿En cuánto cambió el nivel futbolístico de una primera división de Tandil respecto de la quinta categoría de las inferiores de AFA?
-Yo trato de hacer siempre lo mismo cuando entro a la cancha. Hacer jugar a los demás y estar siempre a la hora de recuperar la bocha. En la quinta división, allá en Buenos Aires, se jugaba un poco más rápido, se movía un poco más la pelota, acá se mete mucho más.
-Y allá, tal vez por ser un combinado de juveniles, ¿había menos presión?
-Y? presión hay en todos lados, pero cuando entrás a la cancha  te olvidas de todo. -¿De Arsenal y de vivir en Buenos Aires extrañás algo?
-Sí, los compañeros de la pensión y buenos momentos que pasé allá con el fútbol. Entrenamientos y viajes.
Además, Valerio cuenta que está haciendo los papeles por si alguna vez se le concreta el anhelo de jugar afuera, ya que tiene ascendencia italiana. ?Una vez de más chico, antes de irme a Buenos Aires me salió la oportunidad de irme afuera y lo pensé, lo charlé con mi viejo pero no me animé, era muy chico. Ahora si me decís? ya tengo la valija hecha y me voy mañana. Una vez le senté a mi vieja y le conté que si me salía algo, me iba. Medio que lagrimeó pero yo sé que me va a entender en ese momento porque sabe que es lo que me gustaría hacer?.
Superó el bajón de la operación, el típico miedo postoperatorio y sobre todo la decisión de volverse a Tandil, que no fue nada sencillo ?porque siempre está el gil que dice `aquel se volvió por esto o por aquello´ y, además, porque así como uno por ahí estaba medio caído también la familia?, cuenta ya rehecho y confiado de sus propias armas, reiterando que si sigue trabajando como hasta ahora volverá a tener su oportunidad.
-¿Estás atravesando tu mejor momento futbolístico?
-No, en 2005 estando en la primera de Santamarina y en 2006, en el primer año en Arsenal, pienso que fue cuando mejor anduve, pero estoy empezando a recuperar ese nivel…

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