Para el defensor Diego Araujo el cannabis medicinal quedará sujeto a lo que determine la reglamentación

El pasado sábado en las instalaciones del Centro Cultural Universitario se llevó a cabo una importante jornada explicativa sobre cannabis medicinal, que contó con la presencia de un gran marco de espectadores, quienes acudieron a informarse sobre los beneficios para aquellos pacientes que requieran de este medicamento.

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Cabe recordar que la reunión se dio justo tras aprobarse la ley de uso de cannabis medicinal, por lo que el programa “Buenas y santas” (104.1 Tandil FM) consultó al abogado oficial Diego Araujo para conocer las cuestiones legales acerca de este tema.

Sobre lo aprobado recientemente en el Congreso, Araujo expresó que “esta ley si bien todavía necesita de la reglamentación, de la creación del ámbito de aplicación con los registros que vienen como complemento para dotarla de efectividad, es para aquellos que durante tantos años estuvieron en la lucha para que se acepte el cannabis para su aplicación médica y terapéutica un avance significativo”.

Señaló que “si bien se esperaba que se contemplara la situación de las personas que autocultivan y de esto nada se dice en la ley, no deja de ser un contexto muy favorable para proseguir en la búsqueda de nuevas soluciones relativas al cultivo de la planta de marihuana. Es un paso muy positivo y va a quedar su evaluación sujeta a lo que determine la reglamentación, pero sin lugar a dudas es un reconocimiento muy importante que se hace del uso de la planta y del cultivo para uso medicinal, terapéutico y paliativo del dolor”.

Quienes lo usarán

Sobre quienes podrán utilizar el cannabis medicinal, el abogado manifestó que “dependerá de lo que emerja de la reglamentación, porque la ley es un marco general. La idea que han tenido los legisladores es crear un marco regulatorio para la investigación médica y científica y en función de eso es que estructuran todo el contenido de la ley”.

Dentro de los puntos que necesitan, Araujo indicó que “se prevé la creación de un registro de enfermedades en donde luego los derivados del cannabis puedan llegar a utilizarse. Está prevista la elaboración de un registro de usuario esencial para poder requerir alguna autorización y poder utilizar esos derivados. También es importante las derivaciones que se hacen al Conicet o el INTA para que puedan investigar médica o científicamente la elaboración de sustancia para el tratamiento de las enfermedades. Todavía hay mucho para desarrollar, hay algunos puntos que no están del todo claro y creo que va a hacer la reglamentación de la ley más la creación del órgano de aplicación, que va a depender del Ministerio de Salud de Nación, lo que va a clarificar el panorama”.

Artículo 8

Aseveró que “lo que tiene que quedar en claro es que la ley no autoriza el autocultivo” para luego añadir que “hay un artículo el 8 que deja una puerta abierta porque actualmente la tenencia, independientemente de los fines, está reprimida por la ley lo mismo que el cultivo, aún cuando sea para uso personal. Esta incriminación que hace la ley 23.737, lo hace a todas aquellas personas que la tengan sin autorización o en forma ilegítima. Precisamente el artículo 8 de esta nueva ley, crea un registro de usuarios donde las personas que usan el derivado del cannabis se deben inscribir y previa certificación o pedido de prescripción médica podrán ser autorizados para poder usar estos derivados. Por lo cual la figura sería atípica porque faltaría uno de los requisitos del tipo objetivo penal para su incriminación”.

Remarcó que “todavía quien pueda requerirla y en qué términos los profesionales de la salud puedan prescribirla todavía no está del todo claro y vamos a necesitar esperar la reglamentación”.

Cabe señalar que será el Estado el encargado de hacerlo, distribuirlo y entregarlo en forma gratuita, realizándose los análisis correspondientes en laboratorios públicos.

Derribar prejuicios

Para Araujo “esta ley viene a derribar muchos prejuicios que quiera Dios que también tenga una incidencia directa sobre la ley penal. El año pasado más de 250 magistrados, entre los que se encontraban jueces, fiscales y defensores, emitimos un documento específicamente para requerir del ámbito legislativo un debate amplio que no criminalice a los usuarios de drogas prohibidas, y requeríamos concretamente la derogación efectiva de los tipos penales que directa o indirectamente sancionen conductas relacionadas al consumo personal de estupefaciente”.

Agregó que “me parece que es esencial porque la actual redacción de la ley, que es del año 1989, ha perdido mucho de su valor en cuanto a política criminal a partir del fallo Arriola de la Corte Suprema de Nación, que fue cuando declaró la inconstitucionalidad de la tenencia de estupefacientes para consumo personal, específicamente en el caso de marihuana”.

Detalló que “el documento que emitimos el año pasado incluye la tenencia para consumo personal con independencia del motivo. Luego se requería la participación activa del Estado para que se involucrara en la investigación científica del uso médico y terapéutico de la planta”.

“Fue una jornada muy buena”

Al referirse a lo ocurrido en la multitudinaria charla explicativa que se desarrolló el pasado fin de semana en el Centro Cultural Universitario, recordó que “fue una jornada muy buena porque no solo uno aprendió mucho de situaciones que desconocía por completo; del uso medicinal que tiene con testimonios de pacientes y familiares que se constituyen en evidencia en sí mismo y lo que requieren es la participación activa del Estado para que los apoyen y también para que los controlen”.

Continuó narrando que “hay que hacer un reconocimiento a la Universidad Nacional del Centro, que se ha comprometido a darle un apoyo a la realización de esta campaña en las personas de Cecilia Astigueta y Daniel Herrero y una felicitación muy especial a todo el trabajo desplegado por la Asociación de Cannabis Medicinal de Tandil. Lo que están haciendo es muy intenso, no exento de los peligros que conlleva en función de la penal prohibicionistas que tenemos”.

Tendencia

“En el mundo -dijo- se está reviendo la utilización terapéutica del cannabis, tanto es así que en Uruguay existe una ley con un marco general que autoriza el autocultivo no solo en forma personal sino en lo que ellos denominan clubes de membrecía. En Canadá se hicieron trabajos sumamente interesantes donde el Estado tuvo una participación activa. En Chile, Holanda, España, hay una legislación proclive no solo a aceptar el autocultivo sino también a fomentar por parte del Estado la investigación científica y médica porque hubo muy buenos resultados en determinadas enfermedades”.

Aclaró que “hay que tener en cuenta algo que me parece importante, el cannabis o sus derivados no son la primera opción frente a las enfermedades, sino que la utilizan en lo que se denomina política de reducción de daños o de riesgos”.

Por último indicó que “había en la reunión muchos profesionales médicos algo que es sumamente positivo porque significa involucrarse en una temática que está en un debate permanente”.