Boqueteros robaron un arma, chequeras, ropa y joyas de una vivienda de Tacuarí al 100

En diálogo con El Eco de Tandil, el damnificado relató que el robo ocurrió entre el sábado a la tarde que “pasó la señora que limpia y el lunes a la mañana que volvió, ingresaron por el techo de la planta alta, corriendo las tejas, rompiendo la madera, con eso descendiendo al cielorraso, en el cielorraso hicieron distintos agujeros para buscar por dónde descender y terminaron haciendo un agujero más grande, que es por el que bajaron”.

Afirmó que una vez que ingresaron a su vivienda, los delincuentes se movieron en la planta alta, no bajaron. “Estuvieron revisando todo lo que son los cuartos, sacando las puertas de los placares, tirando todo abajo”, contó y agregó que revolvieron y tiraron todos los papeles de un escritorio que él tiene armado arriba.

Estimó que “más que nada buscaban plata”, pero aclaró que nunca guarda dinero en su casa y consideró que no están dadas “las condiciones para que la gente la tenga en su casa”. 

Al momento del robo, Pichardo se encontraba de vacaciones con su familia y contó que se enteraron cuando los llamó el lunes “la señora, quien automáticamente se contactó con la policía, se contactaron del 911 con nosotros, vinieron, estuvieron un rato y nosotros vinimos de viaje llegando ayer (por el miércoles) para ver un poco cómo estaban las cosas y más que nada por el tema de qué se habían robado”.

Sobre el botín, precisó que “había cosas que por ahí no eran de valor pero sí eran peligrosas como por ejemplo yo tengo un arma, una Browning 9 milímetros, que se robaron, en regla, así que ya hice la denuncia en la policía y en el Renar para que den su pedido de captura, y ya hemos hablado con la fiscalía también”.

 

El botín 

 

Por otro lado, remarcó que “se robaron dos chequeras, una a nombre de Ariel Roberto Pichardo, del Banco HSBC, que ya está dada de baja, y ya tiene el aviso de robo, y después una del Banco Galicia, a nombre de Cumplir Agro, ya está hecha también la denuncia y dada de baja por robo. Esto es importante que la gente lo sepa por si recibe un cheque de mi parte”.

Indicó que también “algunas cosas de electrónica, pero nada del otro mundo; había cosas de ropa muy personales que te regala alguien por ahí que se fue afuera y esas cosas que son identificables, pero más de eso no pasó”. 

Explicó que: “Mi señora había hablado con la fiscalía porque no habían venido en su momento, y creo que el actuar rápido en estas situaciones -después de las 72 horas no pueden detectar nada- también ayuda a poder solucionar esto”.

 

Una decisión

política

 

“Estamos en una ciudad chica, donde más o menos sabemos todos quiénes somos, qué hacemos, dónde están los focos, los problemas, y creo que tiene que haber una decisión política de solucionar las cosas”, lanzó el damnificado.

Aclaró que “a nosotros por suerte es la primera vez que nos ocurre, pero la gente que estuvo en esta casa, hace tiempo, había sufrido un robo también acá. Hace no tanto hubo uno en un almacén a mano armada, cerca de Fugl y Tacuarí. Sobre la zona, creo que hoy no es una zona, ni un lugar, creo que esto se va generalizando y tiene que haber una decisión política de hacer algo”. 

Argumentó que “la policía por un lado actúa, pero cuando intervienen después en la fiscalía, siempre tienen un derecho más y terminan quedando afuera, y siempre hay una segunda oportunidad, o tres, o cuatro, o cinco. Entonces, a veces la policía también actúa, se cansa de agarrarlos y saber que a las tres horas están afuera. Y la fiscalía o los jueces actúan con las leyes que tienen. Entonces, creo que no pasa ni por los jueces ni por la policía, sino por una decisión política, desde arriba, de tomar decisiones y de controlar estas situaciones”.

 

“Uno tiene 

que seguir”

 

Tras haber radicado la denuncia el último miércoles en la comisaría Primera -causa en la que interviene la UFI 12 del Departamento Judicial de Azul-, Pichardo expresó que ahora lo único que queda es “seguir para adelante, seguir haciendo las cosas, por suerte no hubo ninguna desgracia. Lo material va y viene, ése no es el problema, el problema que me asusta más es que estamos teniendo hoy casos de chicos que caminan en la calle y les están robando, les están poniendo un cuchillo, empezás a tener esas cosas. Eso me preocupa más que la ropa o la plata, que ocurran estos hechos y que no haya una decisión de terminarlos”. u