Se complicaron los pases de Bustos y Meza

Todo indicaba a que el lateral derecho Fabricio Bustos se convertiría en el nuevo refuerzo de River, pero el Inter de Porto Alegre cambió los términos de la negociación a último momento y complicó la llegada del ex Independiente al "Millonario".

Si bien Bustos tenía todo acordado con el club de Núñez para firmar un contrato hasta diciembre de 2027, el conjunto brasileño accionó una cláusula de renovación automática -debido a que su contrato se vence en diciembre- por objetivos de cantidad de partidos y ahora el precio del jugador argentino creció en gran medida.

El equipo brasileño afirma que el lateral derecho jugó una totalidad de 36 partidos de los 42 posibles en la actual temporada, dando un porcentaje, aproximado, del 86 por ciento y la cláusula de renovación se activa con el 60 por ciento de los encuentros disputados.

Por otro lado, el club de Núñez mantiene la esperanza de que, si el futbolista decide no jugar los 19 encuentros restantes, el porcentaje quede en un 59 por ciento e Inter de Porto Alegre no tenga la posibilidad de accionar la cláusula de renovación automática.

Por esto, para volver a negociar por el pase de Bustos, River deberá presentar una oferta concreta por el ex Independiente.

Aun así, el club brasileño espera una suma de 7.000.000 de dólares por el futbolista y, desde Núñez, pretenden pagar por él solo 4.000.000 de la moneda estadounidense.

El elenco "Millonario" pelea contrarreloj, ya que debe presentar la lista de la Copa Libertadores antes del viernes a las 19.

A su vez, Monterrey de México le negó la salida al mediocampista Maximiliano Meza, quien tenía previsto viajar a Buenos Aires para sumarse a River, luego de la crisis que estalló en el club tras la eliminación de la Leagues Cup frente a Austin FC de los Estados Unidos.

Tras el despido de su entrenador Fernando Ortiz y la presentación de un técnico interino, los propietarios de la entidad azteca firmaron la venta de Meza a cambio de un resarcimiento de 2 millones de dóllares y, si bien las negociaciones con el "Millonario" venían encaminadas, su arribo a la Argentina se vio interrumpido por problemas que exceden al club argentino.

El ex futbolista de Independiente quedó atrapado en México por cuestiones de documentación y tiempo, a la espera de poder desprenderse completamente del club y lograr vestir la camiseta de River, equipo del cual es hincha.

En medio de los revuelos y las críticas, los dirigentes aztecas tomaron la decisión de no apurarse a la hora de deja ir al mediocampista, quien es uno de los jugadores más importantes del plantel.

El futbolista había tomado la decisión de jugar en el "Millonario" tras la propuesta realizada por el entrenador Marcelo Gallardo -un contrato hasta diciembre de 2026-, la cual logró que rechazara ofertas de otros clubes como el Palmeiras, Corinthians, Gremio, todos de Brasil, y un equipo árabe.

A su vez, el mediocampista deseaba compartir institución con su hermano Juan Cruz, quien debutó en la reserva del club de Núñez.

Aun así, desde River se mantienen optimistas, ya que esperan que "Rayados" le permita viajar a Meza en las próximas horas para poder realizar la revisión médica el miércoles por la tarde o jueves por la mañana e inscribirlo a la lista de la Copa Libertadores.

Como segunda opción, el "Millonario" deberá pagar la cláusula de rescisión de 4 millones de dólares en caso de que las negociaciones no avancen.