La mamá de Jorge Bustamante pide justicia y que los asesinos “se pudran en la cárcel”
Claudia Villalva eligió a El Eco de Tandil para hablar por primera vez de la muerte de su hijo. Mientras la familia aguarda distintos peritajes, que recién estarán para el mes de agosto, está convencida que “actuaron en el hecho una o dos personas más”. Aseveró que “hay muchas noches que me cuesta dormir” y sobre los detenidos Tami y Morales los calificó como “dos perejiles”. Hoy, Jorge cumpliría 25 años.
El dolor de una madre ante la trágica pérdida de un hijo resulta intransferible, y más si a ese sentimiento se le agrega una intensa búsqueda de saber la verdad sobre lo que verdaderamente pasó con su hijo Jorge Bustamante.
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Claudia Villalva recibió a El Eco de Tandil en su departamento, para contar las sensaciones que tiene a seis meses del asesinato de su hijo. Acompañada por Agustín, otro de sus hijos, comenzó expresando que “es la primera vez que decidió hablar con un medio de prensa sobre la muerte de mi hijo. Lo que más me desvela es saber qué fue lo que realmente pasó con Jorge y junto a mi abogado Mauricio D’Alessandro, que está trabajando muy bien, haremos todo lo posible para saber bien todo lo acontecido aquella noche del mes de octubre”.
Reconoció que “como mamá todos estos meses realmente han sido malos para mí y ahora se suma que este 24 de abril estaría cumpliendo 25 años. Duele todo mucho y sigo sin encontrar explicación a lo sucedido”.
Villalva recordó que “aquella noche él me llamó a la 1 de la madrugada y no sentí el celular. Cuando me despierto y salgo para el trabajo le mandé un mensaje y nunca me contestó. A media mañana le preguntó a Agustín si sabía algo y me dice que había ido al banco a realizar unos trámites al centro. Jorge era de comunicarse permanentemente y lo que me extrañaba era que el llamado lo había realizado desde la aplicación whatsapp, cosa que odiaba hacer. Había algo que como madre presentía, por lo que pregunté el resto de la mañana por Jorge a cada rato”.
Agustín Bustamante, señaló que “la última vez que lo vi fue cerca de las 0 que me fui un rato de mi casa ya que al otro día jugaba al fútbol para Ferrocarril Sud. Jorge se enojaba si salía antes de un partido, pero igual me fui, le dije en media hora regresaba pero en realidad estuve más de una hora. Al retornar, a las 2 de la madrugada, ya Jorge no estaba. Cuando me levanto veo los mensajes de mi mamá y él no estaba en la casa”.
Detalló que “sabía que Jorge no me iba a fallar porque cada vez que podía me iba ver jugar y ese día podía. Sin embargo nunca apareció, ni respondió los mensajes. Me fui a jugar la semifinal y mi mamá se fue hasta la comisaría Tercera a realizar la denuncia por la ausencia de mi hermano”.
Buscar la verdad
El tiempo avanza y el recuerdo de esos turbulentos días en que el caso Bustamante acaparó la atención de la prensa en general resulta muy difícil de olvidar para la familia. “Me contacté con todos su amigos-reseñó la mamá-y se armó una cadena muy grande pidiendo por la aparición de Jorge. Fueron momentos de desesperación. Le dije a mi exmarido que fuéramos a buscarlo a los hoteles o recorriéramos los lugares en los que podía estar, porque no sabíamos si le podrían haber hecho algo como drogarlo. De todas formas yo esa mañana estaba muy intranquila cosa que no es habitual en mí”.
Del caso hubo algunas conjeturas y también profesionales que salieron a embarrar la cancha plantando algunas cuestiones personales. “Todo lo que tenemos en el expediente no habla que vendiera droga. Son todas mentiras, al menos las fojas que tengo en mi poder, el resto lo tiene el abogado D’Alessandro”.
La vida para la madre de Jorge Bustamante cambió radicalmente desde que tuvo que reconocer el cuerpo de su hijo sumergido en un arroyo y tratado con vehemente violencia. “Cuando estoy en mi departamento tengo siempre la persiana baja, ahora levanté porque venían ustedes. Hace seis meses que el televisor solo se prende cuando viene Agustín. Concurro a mi trabajo que es cuidar abuelas y hay muchas noches que me cuesta dormir”.
Tami y Morales son “dos perejiles”
La causa tiene dos detenidos, Ángel Tami (20) y Nahuel Morales (19), quienes por su accionar se les endilgó el delito caratulado como “Homicidio en ocasión de robo”. Al respecto Claudia Villalva dijo que “son dos perejiles, en la muerte de mi hijo hay una o dos personas más que también actuaron. A mi hijo lo torturaron. Lo encontré ahorcado en un arroyo. ¿Qué quisieron robarle? ¿Qué querían que hiciera Jorge y él se negó? Una de las autopsias arrojó que en el cuerpo de Jorge no había consumo de drogas, eso me comunicó el doctor Mauricio D’Alessandro”.
Detalló que “hablé con Emanuel Ramírez, quien fue estuvo en la causa y quedó libre. En una nota dijo que nunca se iba a saber quien había matado a mi hijo, porque había mucha gente involucrada. Cuando le pregunté qué sabía esquivó responderme”.
El caso también contó con una arista sexual que la madre y su hijo no tuvieron inconvenientes en hablar. “Creo que se buscó ensuciar a una persona que no puede defenderse. A él lo llaman y va a ese encuentro. De ahí en más hay cosas que no están claras porque el celular nunca se recuperó. Lo poco que se sabe es por los peritajes tecnológicos realizados y así pudo la investigación dar con estas dos personas”.
Agregaron que “a veces pienso que se equivocaron de persona, porque no logramos entender cómo Jorge estaba relacionado con estas personas”.
Detallaron que “nosotros desconocíamos si tenía un Facebook paralelo; que era drogadicto o gay, todo eso lo expresó el abogado que defiende a uno de los detenidos. Si Jorge tenía otra cuenta o era lo que sea, creemos que nos son indicadores para asesinarlo como lo hicieron. Él era trabajador, le gustaba estudiar y estar en familia. No estaba en pareja. Estuvo de novio con una chica y luego cortaron pero cada tanto se veían, de esto hace bastante. Que haya sido lo que dicen, no lo sabíamos. Nos enteramos por quienes están presos y un abogado”.
Justicia
Villalba dijo estar “muy conforme con el accionar de la Justicia, con lo realizado por la comisaría Tercera, con el aporte del intendente Miguel Ángel Lunghi, el doctor Marcelo Sobrino, fiscal general del Departamento Judicial de Azul, el doctor Lavayén, el doctor D’Alessandro y el fiscal Gustavo Morey, quienes se portaron muy bien con nosotros”
El único reclamo realizado por madre e hijo fue para con la Policía Local ya que “ellos encontraron el auto mucho antes que fuera oficial y no fueron capaces de avisarle a la familia que había un vehículo incendiado parcialmente. Eso fue entre las 10 y las 11, recién nos enteramos a la tardecita que el vehículo estaba por la zona de La Movediza”.
“Quiero saber quién lo mató”
Cada día que pasa es uno menos para conocer la verdad, así lo entiende Claudia Villalva, anhelando que al momento del juicio los involucrados digan la verdad de todo lo que pasó el 24 de octubre de 2018. “Quiero saber quién mato a mi hijo y creo que para eso deberé esperar hasta el 2020, porque recién los ADN de las huellas recogidas en la escena donde dejaron el auto y el arroyo donde apareció el cuerpo estarán para el mes de agosto”.
Añadió que “la rueda con la que le golpean la cabeza no estaba, pero sí había huellas en una de las tuercas. Estamos expectantes porque en los trabajos que realizaron en el vehículo puede surgir lo que nosotros pensamos que actuaron más que las dos personas que están detenidas”.
También narró que “para mí Tami, que se quiso hacer pasar por loco, y Morales son igual de asesinos, porque hasta el momento declararon que estuvieron ahí y se responsabilizaron de lo ocurrido. Lo único que le pido a la Justicia es verle la cara a estos dos y si no encuentro a los reales culpables que ellos paguen y que se pudran en la cárcel”.
Manifestó que “de los detenidos que hay uno tiene criminis causa, por lo que le ruego al Juez que la condena sea para los dos iguales y que lo saquen del ‘Jardín de Infantes’ que están ahora en la penitenciaría de Azul. Así como yo sufro, quiero que sus padres y ellos mismos sufran. Eso es lo que deseo fervientemente”, concluyó en medio de un dolor que no cesa.