b metropolitana
Clausuraron el estadio de All Boys tras los incidentes
La Ciudad de Buenos Aires clausuró el estadio de All Boys tras los desmanes ocurridos anoche en sus calles aledañas al finalizar el encuentro con Atlanta, que arrojó un saldo de 16 efectivos policiales heridos, pero la dirigencia de Primera B salió a respaldar públicamente a los directivos del club de Floresta.
Recibí las noticias en tu email
El Ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Martín Ocampo, anticipó que All Boys “jugará sin público durante mucho tiempo”, en un castigo que se aplicará luego de esos incidentes que protagonizaron ayer sus hinchas al enfrentarse con la Policía, después de haber perdido con Atlanta por 3-2.
“All Boys jugará sin público durante mucho tiempo. Hasta que termine este año seguro y probablemente todo el año que viene también”, adelantó Ocampo, quien anticipó también que “con los hinchas que protagonizaron los incidentes habrá tolerancia cero y no volverán a ingresar a las canchas de fútbol”.
Los disturbios comenzaron ni bien finalizó el partido válido por la undécima fecha del torneo de Primera B cuando los casi 50 allegados a la entidad de Villa Crespo que ocupaban la tribuna que da a la calle Miranda pretendieron celebrar la victoria con sus jugadores, en el marco de un cotejo que se disputó sin presencia de hinchas visitantes.
Algunos gestos inapropiados y un festejo entendido como “excesivo” de la gente de Atlanta encendió la ira de la barra de All Boys, que buscó hacer “justicia por mano propia”.
Así, poco más de 30 barras se trasladó hacia la calle para intentar interceptar a los allegados al “Bohemio”, pero distintos móviles policiales les salieron al cruce y repelieron el avance de aquellos. Como consecuencia de los enfrentamientos, que se extendieron por aproximadamente 10 minutos, un total de 16 efectivos policiales resultaron con diferentes lesiones y contusiones, siendo tres de ellos derivados al Hospital Churruca.
“Le vamos a reclamar a All Boys por los daños contra el patrimonio de la ciudad y también se analizará qué hizo la gente de Atlanta que fue a la cancha, como dirigentes y no como hinchas, y por lo tanto deben ser prudentes”, añadió Ocampo.
“Por todo esto es que no están dadas las condiciones para el regreso al fútbol de los hinchas visitantes. Es algo que requiere una mayor cantidad de efectivos policiales y en ese caso se desatendería a los barrios”, concluyó el funcionario.
Y anoche el club All Boys ofreció una conferencia de prensa en la que se hizo eco del respaldo de otras dirigencias como la del propio Atlanta, que en la palabra de su presidente, Gabriel Grecco, deslindó “cualquier responsabilidad de los directivos” de la entidad de Floresta. “Nuestros allegados se sintieron y estuvieron bien protegidos en todo momento”, aclaró el titular bohemio.
En tanto Daniel Ferreiro, máximo referente del ascenso y dirigente de Nueva Chicago, puntero de la B Nacional, fue más enfático y cargó directamente contra las autoridades. “Acá se ve que hay una justicia para ricos y otra para pobres, porque en el tema de garantizar la seguridad dentro del estadio la gente de All Boys hizo todo bien”, disparó.
Por su parte Héctor Rozenblat, abogado “socio e hincha de All Boys”, según se presentó, advirtió que “todavía no se pudo ver la causa. Se secuestraron todas las cámaras de seguridad. Estamos sorprendidos porque el club hizo todos los deberes. Nos pidieron cierta cantidad de policías y los pusimos. Después, nosotros no podemos hacernos cargo de lo que pasa en las calles. Eso no es nuestra responsabilidad”.
Rozenblat también aseguró que lo “sorprendió que las autoridades policiales dispusieran menos efectivos (70) que para otros encuentros, considerando que era un partido de alto riesgo”. Por ejemplo el mes pasado hubo 290 contra Deportivo Riestra y antes 120 ante Sacachispas.
“Vamos a interponer todos los recursos que sean necesarios para que el club vuelva a abrirse”, finalizó el abogado. El estadio de All Boys tiene la faja de clausura y la conferencia de prensa se llevó a cabo entonces en un anexo sobre la calle Mercedes.
Y finalmente el presidente de All Boys, Fabián Aguirre, bregó porque el “club se vea lo menos afectado posible. Tomamos la institución hace cuatro años, pero vemos que todo el esfuerzo que hacemos no se ve reflejado en estos episodios. No justifico lo que pasó, porque estamos luchando para que la institución no quiebre, y con la gente de Atlanta hicimos un esfuerzo para que estuvieran bien”, completó. Otra vez el fútbol y la violencia.