El sector empresario rechazó el paro como metodología y cuestionó a los gremialistas

Los conductores de la Cámara Empresaria de Tandil (CET) y de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Tandil (Apymet) analizaron la medida de fuerza convocada para mañana por la CGT y las CTA. Con diversos matices, rechazaron el paro como metodología de protesta y cuestionaron a los dirigentes. Por otra parte, estimaron que en Tandil se sentirá la huelga en el sector de la metalmecánica y en la construcción, además del transporte y la educación.

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Mientras los sindicatos llamaron a adherir a la medida, circulan a través de mensajes de Wathsapp pedidos para que los trabajadores asistan a sus puestos. “El paro nacional nos hará perder miles de millones de pesos a todos nosotros. Cambiemos los paradigmas sindicales, que explican que el paro es porque las bases lo piden. Digamos basta. Rompamos esta lógica de paro peronista, (cuando se encuentra lejos del poder), que nos tira a todos para atrás”, expresa una de las cadenas de tinte oficialista.

Y agrega que “la CGT nos quiere a todos en casa como demostración de su fuerza en relación al presidente Macri”. En tanto, propone que “trabajemos para y por un Argentina mejor. La contundente y exitosa marcha de la democracia del 1 de abril nos demostró que somos muchísimos. El 6 no paremos”.

“No nos ayuda
a salir adelante”

Con respecto a la medida de fuerza, Patricio Fernández, titular de la CET, consideró que “el paro es una medida que no sirve, es una forma que no nos ayuda para salir adelante. Creo que tenemos que empezar a trabajar hacia adelante y no usando las prácticas de los últimos 30 años que no dieron ningún resultado.

Y mencionó que “los que tenemos algo de memoria, nos acordamos de los 13 paros que (Saúl) Ubaldini le hizo a (Raúl) Alfonsín, que para lo único que sirvieron fue para generar un malestar en la gente más que para soluciones”.

En igual sentido, afirmó que “la Argentina se saca adelante trabajando con normas claras y sacrificándonos todos” y agregó que los motivos del reclamo “no están absolutamente aclarados porque es muy generalista”. Al mismo tiempo, indicó que una de las consignas es contra el desempleo, cuando desde el Sindicato de Empleados de Comercio confirmaron que en Tandil han tenido muchas altas de trabajadores.

“Creo que debemos asumir la realidad como está, trabajar para adelante y poniéndole el hombro y el esfuerzo al país”, concluyó.

“Son paros
de dirigentes”

En relación al impacto de la huelga en esta ciudad, Patricio Fernández sostuvo que “en realidad son paros de los dirigentes. No son paros exigidos por las bases. Son paros de las dirigencias para tratar de mantener su poder”.
De todos modos, resaltó que “sabemos que no estamos del todo bien, que hay que mejorar la situación, pero tenemos que mirar hacia adelante” y agregó que “en este tipo de paros, cuando la UTA se pliega y bloquean todas las posibilidades en lo que respecta a los colectivos y al traslado, en ciudades grandes es de impacto importante. En ciudades como la nuestra, espero que en el sector comercial, que está haciendo un enorme esfuerzo por mantener su mano de obra e incrementarla, no sea de tanto impacto”.

Y lamentó que “en el Sindicato de Empleados de Comercio se plegó la dirigencia y esto ha significado que no haya guarderías, entonces muchos empleados de comercio que mandan a los chicos a las guarderías de comercio no tienen con quien dejarlos. Estas cosas sí están alterando la situación. También coincide con un paro de educación, entonces la gente que tiene chicos pequeños no puede asistir a trabajar, pero en realidad es motivado más por un bloqueo generado desde la dirigencia que por la misma gente”.

Las cadenas
de whatsapp

Con respecto a las cadenas antiparo, el presidente de la CET dijo que no recibió mensajes pero consideró que “trabajaría, más que en una contra convocatoria, en un esfuerzo para convocar al diálogo a todos los sectores y esto creo que lo tienen que hacer tanto los dirigentes, los sectores empresariales y gremiales, como también el mismo Gobierno. Hay que sentarse en una mesa y tratar de encontrar soluciones a los problemas planteados en conjunto, que conformen, pero trabajando”.

Sumado a esto, señaló que “con las contraofensivas no estoy de acuerdo. La participación del que no hace el paro es no hacerlo, no generar o tratar de irritar aún más la situación”. Como ejemplo, mencionó el video del titular del gremio de los taxistas Omar Viviani, quien fue filmado en Buenos Aires mientras daba un mensaje a sus dirigentes de dar vuelta los autos de quienes decidan trabajar. “Abona con mayor firmeza mi postura de llegar al diálogo y de bajar los ánimos. No nos sirven los ánimos crispados, nunca se encuentran soluciones en actitudes absolutamente antidemocráticas como la que tuvo este dirigente”, remarcó.

“A la gente
no le alcanza”

Por su parte, Gustavo Dacovich, presidente de Apymet, estimó que la medida de fuerza va a impactar en Tandil debido a que “los maestros se van a adherir fuertemente; todo lo que es colectivos y UTA se unen, y eso va a parar mucho, en general, la ciudad. Va a ser un paro fuerte, estoy seguro. Se va a hacer sentir el paro seguramente. Después podemos discutir si estamos o no de acuerdo, pero todos estos reclamos tienen sentido, la mayoría”.

Sobre el paro como metodología, señaló que en 1983, con el regreso de la democracia, tenía 17 años. “De ahí en más empecé a ver paros, y no veo a ningún trabajador millonario, no veo empresarios que puedan pagar más, lo que he visto es que ha habido gente que ha sido oportunista en esta situación”, advirtió.

Dacovich le apuntó a los dirigentes al señalar que “son los que están 20 ó 30 años detrás de la misma silla”, aunque reconoció que “acá hay algo justo, a la gente no le alcanza, eso está más que claro. Yo estoy muy seguro de que hay necesidad real, pero también considero que hace 30 años que vengo viendo paros y no cambió nada. El trabajador sigue mal. Nos rasgamos las vestiduras por los trabajadores y acá hubo gobiernos de todo tipo y la mayoría fueron afines a los sindicatos del momento”.

Analizó que “lo que hay que plantearse es si sirve la metodología. Yo creo que no. La realidad es que no. Creo que hay que empezar a sentarse a hablar en serio”.

Con respecto al impacto de la medida en Tandil, estimó que “lo que es UOM (Unión Obrera Metalúrgica) va a incidir realmente. Es algo importante la metalmecánica en Apymet” y agregó que le restaba sondear el sector alimenticio para conocer la postura del personal. Por otro lado, indicó que la adhesión de la Uocra “también va a incidir”.

“Estamos fallando
en la metodología”

En relación a las consecuencias de la huelga para las pymes, Dacovich evaluó que “es empeorar una situación. Sabemos que nos está yendo mal y todavía trabajamos menos, nos va a ir peor. Creo que estamos fallando en la metodología. Creo que el reclamo es justo, pero considero que hacer un paro, no he visto logros importantes como para decir que la metodología ha dado resultados. Acá va a estar más empobrecido el personal, más empobrecida la empresa y automáticamente pasa a tener un riesgo la fuente laboral”.

Resaltó que “no hay una megaempresa en Tandil, como fue en su momento Metalúrgica Tandil que tenía 2 mil empleados. Acá hay empresas chicas o medianas. Entonces en una empresa de diez empleados, siete o cinco, un día no se trabaja y repercute muchísimo en su facturación. Es un reclamo justo, lo que creo que no es atinada la metodología, pero es mi forma personal de ver las cosas” y aclaró que “en la comisión directiva hay gente que no piensa como yo”.

Gustavo Dacovich tampoco recibió las cadenas que piden no adherir al paro, pero resaltó que en las pymes “los empleados saben cuál es nuestra situación, que no es que alguien se está haciendo millonario y el otro se empobrece como sé que ha pasado en otros momentos. Acá estamos en un momento muy difícil para todos, muy complejo para todos”.

A pesar de la situación actual, reiteró que “soy optimista, por eso tengo mi pequeña empresa y siempre trato de ir adelante, porque creo esto se va a revertir. Ha pasado en otros momentos. También tuvimos la crisis de 2001 y salimos airosos, los precios internacionales mejoraron e incidió mucho en el mercado local. Entonces no pierdo el optimismo de que se va a revertir todo esto”.

Para cerrar, evaluó que “hay una cuota grande de política, no hay que mentirse, hay todo un movimiento político atrás con el que se puede estar de acuerdo o no, pero es harina de otro costal en relación al reclamo que es justo porque la situación económica del empleado es compleja, como así también la de las pymes”.
Gustavo Dacovich, presidente de Apymet.