La causa por la muerte de un adolescente en Benito Juárez sigue estancada
El tiempo transcurre inexorablemente y el pedido de justicia por parte de la familia de Agustín Rodríguez, joven muerto en Benito Juárez este verano que pasó parece esfumarse, sin que surja una pista firme que pueda acelerar la investigación.
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Han pasado varios meses del grave hecho que dejó a un adolescente muerto y a otro internado, y en todo este tiempo se siguen desconociendo las causas que provocaron el cruento ataque. La gente del lugar tiene distintas versiones, mucha de ellas fábulas, y ninguna que pueda ayudar a esclarecer lo acontecido.
La última imagen que hay de los dos amigos que iban a pescar, se dio a la salida de una estación de servicio. Luego, con el ataque consumado, no hay datos concretos que permitan ilusionarse con atrapar y llevar a la justicia al o los agresores.
No hay nada. Y después de aquella noche de verano de furia donde se generó hasta una pueblada, hay menos aún.
Las familias Rodríguez-Bustos quedaron solas y destruidas, pese a intentar buscar apoyo en medios zonales, provinciales, nacionales y lograr tener un encuentro con el Intendente de Juárez y la gobernadora María Eugenia Vidal.
Hoy el pedido de justicia se circunscribe en la red social Facebook, donde no hay un solo día que Alejandra Bustos, mamá de Agustín, no publique algo con relación a una causa que está absolutamente estancada tras haber pasado seis meses.
“Destruyeron a dos familias. Nos mataron en vida y los asesinos calentitos comen y caminan como si nada. Nadie sabe nada. No veo que hagan alguna campaña por los ‘Agustines’. Veo que hablan de política, como si nada hubiera pasado en Juárez. Torturaron a dos criaturas, uno no vuelve, el otro sigue luchando por su vida y las familias locas luchando como podemos. Quisiera que tomen conciencia de una vez. Que se hable del tema, que se vea, que se sienta que en Juárez, capital de la amistad, mataron a un chico de 15 años y que nadie está ajeno. Me gustaría que los concejales hablen más de la salud y la inseguridad en la que vivimos que es lo más importante para todos los ciudadanos”.
El texto transcripto recibe adhesiones de amigos, al igual que algún video o foto de Agustín con la frase que elige cada día su conmovida madre. Eso la sostiene con la esperanza que la policía active la causa para encontrar a quien mató a su hijo e hirió de gravedad a su amigo.
El hecho
Como se detalló oportunamente, el pasado 10 de enero dos adolescentes tuvieron la idea de ir a pescar, aprovechando las cálidas noches de verano. Tomaron sus bicicletas y partieron en busca de una aventura más. Hicieron escala por provisiones en una estación de servicios y continuaron el viaje hasta uno de ellos encontrar la muerte y el restante quedar gravemente herido.
A Agustín Bustos y Agustín Rodríguez los encontró un camionero tirados a la vera de la Ruta 86, con severas heridas, por lo que dio aviso a la policía y al servicio de emergencia del Hospital Eva Perón.
Con el fallecimiento de Bustos, los vecinos se indignaron, en aquella noche de calor, y al no encontrar respuestas por parte de la policía apedrearon las instalaciones de la comisaría, siendo reprimidos por los uniformados con gases lacrimógenos y balas de goma.
Luego, los vecinos se dirigieron hacia la casa del presunto instigador del asesinato a quien le prendieron fuego parte de la casa, una camioneta y un galpón.
La locura se apoderó de todos, debiendo actuar Gendarmería y provocando la remoción del comisario Félix Silva y el subcomisario Luis Cristeche, siendo reemplazados por el comisario Alfredo Puig y el subcomisario Walter Suárez.
Las esquirlas de aquella noche llegaron hasta la Jefatura Departamental donde en un horario inusual, cerca de la medianoche, asumió Luis Albertario quien en las primeras declaraciones periodísticas dijo que estaban trabajando junto a la fiscal, la doctora Laura Margaretic en procura de esclarecer lo que pasó.
Lo acontecido en pleno mes de enero, fue noticia nacional, pero lentamente los días fueron pasando y el ritmo de la vida en la vecina ciudad volvió a ser el mismo, excepto para dos familias que quedaron destrozadas y piden ser escuchadas ya que al decir de los damnificados “nadie les da una respuesta”.
Allanamientos
En los primeros días de febrero se llevaron a cabo dos allanamientos en simultáneo, en Pasteur al 1700 de Tandil y en otro domicilio en la ciudad de Benito Juárez. Todo esto fue ordenado por la fiscal de la causa la doctora Laura Margaretic en el marco de la causa de homicidio y lesiones graves que sufrieran dos adolescentes.
Según se informó oportunamente “se hallaron elementos de utilidad para la investigación” catalogando el trabajo realizado como positivo. En Tandil se secuestró un vehículo marca Fiat, modelo Palio y teléfonos celulares. En tanto que en Benito Juárez se secuestraron también teléfonos celulares y prendas de vestir.
Pese a esto el tiempo siguió avanzando y cerca de llegar al mes de julio, la causa tiene un nene muerto, uno internado, y hasta el momento no hay detenidos ni se sabe lo que pasó.
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