EN TANDIL
Las Pymes van a sentir el impacto de la crisis en marzo
Sin embargo, desde APyMET advierten que existe “una baja en el consumo”.
De acuerdo a un informe realizado por la CAME, la actividad industrial cayó un treinta por ciento interanual.
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Ante este panorama, El Eco Multimedios consultó al presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Tandil (APyMET), Omar Farah, que aseguró que si bien “hubo una caída en el consumo” durante el mes de enero, tal vez tenga que ver “con las vacaciones”. Además, adelantó que “en febrero se va a mantener”.
Durante la entrevista, Farah contó que “estamos haciendo una recorrida. Todavía no hay una caída plena en el sector metal mecánico pero sí en el alimenticio y los que llegan al consumidor final, que es el cuarenta o treinta por ciento del sector industrial de Tandil”.
El traslado de precios
El empresario detalló que a nivel local, las Pymes “están teniendo problemas” para poder trasladar a los precios el incremento del costo de la parte mayorista; además de las subas de insumos o salarios.
En este sentido, agregó que sobre todo muchos de los sectores orientados al consumo, principalmente la industria alimenticia, justamente “no tienen la posibilidad de trasladar a los precios el incremento de los insumos”. A esto se le suma que ante panorama general, existe “una baja en el consumo”.
En la calle
En esta línea, advirtió que el momento definitorio será cuando lleguen los tarifazos.
“Esto se va a empezar a notar en la calle, y en sectores que todavía no lo han sentido. Lo van a notar cuando lleguen los incrementos en las tarifas de los servicios. Estamos hablando de 180 por ciento de aumento en algunos casos; y el 3500 por ciento en el caso de la energía”, alertó Farah.
Además, aseguró que “el impacto de este sector que produce bienes intermedios y van a otro proceso final lo vamos a sentir a partir de marzo o abril”.
El aguante
De cara a panorama adverso que se viene, el sector tiene una estrategia que podría definirse como de resistencia.
“Depende de cómo mantengan la posibilidad de seguir produciendo, hasta qué punto aguantar. Lo que hacemos en estos casos es conservar el empleo, achicarnos en los gastos y mantener el cliente”, dijo el presidente de APyMET.
No obstante esto, alertó que "las Pymes no tienen espalda para mantener esto, y a los niveles de los costos de financiación que estamos manejando hoy en día a pesar de que están bajando las tasas, los créditos que te ofrecen no bajan del cien por ciento de interés anual”.
“El tema es trasladar la inflación a los precios y lograr el ingreso correspondiente después de haber aumentado esos valores”, añadió.
El próximo semestre
De cara al resto del año, el panorama sigue siendo complicado ya que “el impacto va a ser un achicamiento general y un sostenimiento mientras se pueda, a ver si a partir del segundo semestre esto mejora”.
“Para el resto del año se espera un cinturón cada vez más ajustado. El incremento de los precios de los insumos, los servicios, va a ser duro; al igual que el sostenimiento de la tasa de interés”, agregó.
Además, la presión tributaria “va a ser importante porque todo viene por la recaudación, al margen de las discusiones y circunstancias que tenga el sector público. El ajuste no es simple, y a veces te va a significar no poder prender la luz o el gas. Todavía falta ese impacto grande, que es a lo que más temor le tenemos”.
Finalmente, ante este escenario, Farah confirmó que aún no hay empresarios que hayan manifestado el cierre de sus comercios, pero "este proceso es violento, puede ser de una semana a la otra. La rapidez de la ejecución de este tipo de ejecuciones es imprevisible”, cerró.
El informe
De acuerdo al informe realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), el Índice de producción industrial pyme registró en enero una caída en promedio de 30% interanual a precios constantes y un descenso de 9,1% en la comparación mensual.
La entidad advirtió que “la industria manufacturera pyme comenzó el año con una fuerte caída”, e indicó que registró en el primer mes del año una “merma del 30% en la facturación del sector medida a precios constantes respecto del mismo mes del año pasado”.
Asimismo, remarcó que se trata del segundo mes consecutivo en que se observa una retracción de la actividad fabril, situación que calificó de “preocupante”.
En tanto, las empresas, de acuerdo al informe de CAME, operaron en ese mes con el 70,8% de su capacidad instalada, mostrando un declive de 2,3 puntos porcentuales frente a diciembre.