En 2017, cerca de veinte niños de distintas edades fueron adoptados por familias de Tandil y la zona
La coordinadora del Servicio Zonal de Promoción y Protección de los Derechos del Niño, María Marino, celebró poder cerrar el año con alrededor de veinte niños de Tandil en estado de guarda preadoptiva. “Esto es importantísimo; no en lo cuantitativo, sino en lo cualitativo, por lo que implica para un niño permanecer en una institución o en un hogar y que hoy pueda ser parte de un seno familiar”, manifestó.
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En ese sentido, resaltó la labor articulada que se llevó adelante con el Poder Judicial, que trabajó “muy seriamente” en la elección de las familias y en la vinculación de los niños con ellas.
En la oportunidad, Marino compartió además los desafíos para el año próximo y volvió a destacar el trabajo conjunto con el Municipio, a través de la Secretaría de Desarrollo Social, al igual que con otros organismos de la ciudad.
Planteó que “si no se trabaja en forma conjunta y coordinada, manteniendo el diálogo frente a esto, es imposible, porque es mucho, muy desgastante y un trabajo, a veces, con muchas frustraciones”.
La evaluación
-¿Qué balance de año realizan desde el Servicio Zonal de Promoción y Protección de los Derechos del Niño?
-En realidad es difícil hacer balances cuando uno trabaja en una problemática tan sensible. A fin de año intentamos evaluar todo lo que hemos hecho en función de los niños con quienes trabajamos. Trabajamos con la niñez más vulnerable, más dolida, entonces, los balances son difíciles, pero hablando con la doctora Silvia Monserrat, evaluamos como positiva la cantidad de niños que se han podido ir con familias alternativas, es decir, adoptivas. La verdad es que ha sido un número importante.
Es necesario que las familias que se anotan en los registros de adopción empiecen a tomar conciencia de que ser padre no es solo ser padre de un bebé, sino también de niños un poquito más grandes, de grupo de hermanos. Y la verdad es que estamos llegando a fin de año con alrededor de veinte niños que van a estar en estado de guarda preadoptiva. Eso es importantísimo; no en lo cuantitativo, sino en lo cualitativo, por lo que implica para un niño permanecer en una institución o en un hogar y que hoy pueda ser parte de un seno familiar. Hemos hecho un trabajo a conciencia con respecto a la toma de medidas de abrigo y de aquellas que no pueden culminar con que esos niños vuelvan al seno familiar.
Los servicios hemos tomado la decisión muy responsablemente de pedir al Poder Judicial el estado de adoptabilidad, y el Poder Judicial ha trabajado muy seriamente con la elección de las familias y la vinculación de los niños con ellas. Esto para nosotros es algo para pensar, que estos chicos puedan hoy empezar una nueva vida, si se quiere, en otro seno familiar. Algunos porque tenían familias desintegradas que no los podían contener; algunos sin familias directamente; y otros con familias vulneradoras de derechos con las que era imposible poder trabajar para que esos niños pudieran volver.
-¿Qué implica el estado de preadoptabilidad?
-Implica que están en la guarda adoptiva, que ya fueron evaluados los matrimonios, hay una vinculación y algunos ya están viviendo con estas familias, algunas de ellas de Tandil. El Juzgado de Familia de acá ha hecho un muy buen trabajo con familias de la zona y matrimonios dentro de la provincia de Buenos Aires.
-¿Son chicos de distintas edades?
-Sí. Es interesante porque salió una adopción de un chico que tenía más de 15 años y eso a uno lo llena de esperanzas de poder pensar que a veces un joven de esa edad tenía que pensar su vida dentro de un hogar hasta los 18 porque no había familia para él o referentes familiares para que estuvieran. Igualmente, también hay herramientas para trabajarlo.
Este año hemos trabajado con un proyecto nuevo, que se llama Autonomía Joven, que tiene que ver con el egreso de los adolescentes de los programas. Cuando llegan a los 16 ó 17 y van a tener un egreso independiente, tienen la compañía de un operador durante un año para trabajar todo lo vinculado a su independencia. Este también es un trabajo muy interesante. El chico, cuando cumple los 18 años, cobra una beca a través de este proyecto que es del Organismo Provincial con convenio con el Municipio de Tandil. Hasta el momento, fueron asistidos 27 jóvenes. Son chicos que están viviendo en hogares convivenciales o que están egresando del régimen penal juvenil, antes de cumplir los 18 años.
Las problemáticas
-¿Se trabajó en alguna problemática sobresaliente este año?
-En realidad tuvimos un año bastante alterado respecto a estas situaciones que nos pasaban con enfrentamientos entre jóvenes en la calle. Creo que fue un momento y algunas rivalidades entre grupos, ni siquiera lo llamaría entre escuelas. Particularmente nos tocó trabajar con el Servicio Local algunos chicos, sobre todo, algunos que habían hecho daños en la vía pública. Lo pudimos trabajar para revertirlo y con buenos resultados.
Creo que son situaciones que surgen en momentos puntuales. No es que uno lo trabajó y que no va a volver a suceder, creo que hay momentos puntuales donde hay grupos que se juntan para algo y terminan en esto, como ocurrió con estas agresiones entre grupos. Se pudo trabajar y hoy por hoy se puede decir que no han resurgido. Tuvimos resultados muy positivos con muchos adolescentes porque además eran chicos que nunca habían estado involucrados en situaciones ni delictivas ni de daños, era su primer ingreso en seccional. Con familias que también acompañaron en este proceso y la verdad es que hubo un impacto positivo en el sentido de que los chicos pudieron reflexionar sobre lo que pasó, algunos pidieron poder hacer algo para reparar lo que habían hecho y esta situación podemos decir que hoy por hoy está tranquila.
-En cuanto a la problemática familiar, ¿han aumentado los casos?
-El tema de la violencia y el abuso sexual son los dos pilares donde tenemos que trabajar, es la problemática más grande. Celebro que cada vez hay más organizaciones que estamos trabajando el tema de la violencia hacia la mujer y los niños, y poniéndolo en la opinión pública, porque era algo de lo que no se hablaba, sobre todo, el de la violencia hacia la mujer, que directa o indirectamente trae consigo la violencia hacia los niños.
Otro derecho vulnerado con el que más nos encontramos hoy es el abuso sexual. Hoy y siempre. Quizás la gente se anima más a denunciarlo, los mismos chicos se animan más a plantearlo en el seno de la escuela, la casa de un amigo y empiezan a tener esta información que por suerte se empezó a viralizar con el tema de “estas cosas no se le hacen a un chico” o la cuestión de la violencia hacia la mujer. Entonces, las jóvenes han empezado a tomar esta conciencia, a hablarlo y eso es muy importante, y eso lo tenemos que seguir haciendo nosotros, los trabajadores en niñez, los educadores y todos los que están relacionados con los chicos, plantear diariamente que ellos, ante la duda, tienen que hablar con una persona de su confianza.
Las intervenciones
-¿Qué cantidad de intervenciones se registraron este año y cuántas medidas de abrigo se tomaron?
-Tuvimos 7500 intervenciones y 94 medidas de abrigo. Igualmente es muy difícil dar números concretos respecto a esto porque para nosotros recibir a una mamá y escucharla es una intervención, escuchar a una docente también. Es mucho el trabajo que hay por parte de los servicios, lo que se está acompañando y lo que se intenta prevenir también. Se trabaja mucho con las organizaciones sociales en los diferentes barrios, a través de programas conveniados con el Organismo Provincial. Intentamos trabajar mucho en la prevención, se está trabajando muy bien con el programa Operadores de Calle, que está haciendo su trabajo ahora en La Movediza, también con buenos resultados.
Los proyectos
-¿Qué programas se están llevando adelante en Tandil? ¿Tienen proyectados nuevos para el año próximo?
-Operadores de Calle y Autonomía Joven son dos programas que se implementaron en Tandil a principios de año y continuarán, y el Organismo Provincial prorrogó el resto de los que ya estaban conveniados. Programas nuevos hasta el momento no tenemos porque se está redefiniendo dentro del Organismo Provincial la posibilidad de asignación de nuevas becas.
Hay muchas ganas de poder trabajar con Salud Mental, en algún momento pensamos en poder trabajar con el Municipio y Salud Mental en lo que tiene que ver con un centro de día para niños con patologías psiquiátricas. Eso es algo que realmente nos hace mucha falta, tenemos muchos chicos en programas y que estamos atendiendo con muchas patologías, y esto nos permitiría dar un abordaje un poco más integral. También está la posibilidad de tener otros centros de día más en la ciudad, algún otro proyecto relacionado con el arte o el teatro, es decir, iniciativas tenemos muchas. Esperaremos al año próximo para ver si podemos llevar adelante otro convenio. u
El trabajo conjunto
Durante la entrevista, María Marino resaltó el trabajo conjunto con el Municipio, a través de la Secretaría de Desarrollo Social, al igual que con otros organismos de la ciudad.
“Este trabajo no se puede hacer solo, si querés trabajar en niñez y adolescencia en serio, hay que hacerlo todos juntos y esto implica desde los servicios Local y Zonal, las ONGs, el Municipio, el Poder Judicial, las fiscalías, el CPA y la Policía”, sostuvo.
Planteó que “si no trabajamos en forma conjunta y coordinada, manteniendo el diálogo frente a esto, es imposible, porque es mucho, es muy desgastante y es un trabajo a veces con muchas frustraciones”.
La coordinadora del Servicio Zonal de Promoción y Protección de los Derechos del Niño reconoció entonces que “es un trabajo difícil, pero lo principal es que los que estamos al frente de esto nunca vamos a bajar los brazos y vamos a seguir trabajando porque confiamos en los chicos”.
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