Colocarán un semáforo y cerrarán el bulevar para abordar el tránsito “conflictivo” de avenida Brasil
El accidente ocurrido este lunes en la esquina de Brasil y Roser puso en el foco la situación del tránsito sobre la avenida y reeditó el planteo que en varias ocasiones efectuaron los vecinos de la zona y los colegios Santo Domingo, San Ignacio y Ayres del Cerro, frente al flujo de personas que concentra ese sector de la ciudad.
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En ese marco, el Municipio, a través de la Dirección de Vialidad, proyecta una serie de acciones a concretar en los próximos meses. En principio, las intervenciones apuntan a la colocación de un semáforo en la esquina con Roser y Rivas y a la continuidad del divisor central para impedir el giro a la izquierda y los cruces, especialmente en la confluencia de las calles Pozos, Gardel y Quequén, en una obra que estará unificada con la construcción de un distribuidor de tránsito en la zona del acceso al Cementerio y avenida Fleming.
El desarrollo del esquema propuesto, que estará acompañado por la demarcación de las sendas peatonales dado el caudal de transeúntes que circulan por esa zona, está previsto para este año.
Las intervenciones
En diálogo con El Eco de Tandil, el coordinador de Transporte y Planificación de Tránsito del Municipio, Esteban Risso, anunció las próximas acciones tendientes a mejorar la situación del tránsito.
En primer lugar precisó que ya se realizaron las perforaciones con las bases de hormigón en las que se instalarán los postes de los semáforos en la esquina de Brasil y Roser.
Evitó referirse a plazos ya que aún se encuentra en pleno proceso el trámite de compra y remarcó que la decisión de ubicar un dispositivo en esta esquina responde a la planificación de la Dirección de Vialidad de la comuna frente a lo que definió como un tramo “conflictivo”.
En tanto, señaló que la situación en Pozos requiere un abordaje distinto, que obligó a plantear como mejor opción el cierre del bulevar central para eliminar el cruce, y que se extenderá desde Rivas hasta Fugl.
En la planificación se determinó que esta obra quedará incluida en el proyecto que prevé la construcción de un distribuidor de tránsito en la entrada del Cementerio municipal, en Carrillo y Fleming, otra zona “muy conflictiva” en la que intervienen las maniobras de retome por Larrea.
Ordenar el tránsito
El coordinador de Transporte y Planificación de Tránsito analizó que ese sector presenta inconvenientes por el caudal que presenta y por sus características. “Hay mucho flujo de tránsito y Rivas es una calle muy transitada, utilizada como colectora de avenida Falucho al igual que Pozos”, describió y a ello sumó que “muchos automovilistas llegan a Brasil desde Avellaneda pero desviándose por Carriego hasta Gardel”, como una “vieja costumbre” antes del avance en la instalación de semáforos.
En definitiva enfatizó que, dado que la zona representa un “polo de atracción muy importante”, el foco está puesto en “ordenarlo”, y se mostró optimista al considerar que “vamos a mejorar la seguridad en la circulación que hoy está comprometida”.
Con vistas a nuevas intervenciones, Risso transmitió cautela y dijo que modalidad de trabajo apunta a evaluar el resultado de las modificaciones planificadas antes de impulsar nuevas propuestas.
En ese sentido se refirió al impacto que tendrá en la circulación la construcción del distribuidor de tránsito frente al cementerio y la pavimentación de Larrea, entre Tacuarí y Martín Fierro.
Pedidos de vecinos
En otro pasaje de la entrevista el funcionario se refirió al reclamo impulsado por la comunidad educativa de tres establecimientos emplazados por la zona y ratificó que recibieron respuesta con precisiones en torno a la planificación prevista.
De todos modos admitió que hace algunos años se generó un expediente a raíz de un pedido de un vecino de avenida Brasil al 200 que motivó que “se analizara” la situación en el lugar para tomar acciones en concreto.
Si bien la solicitud se enfocaba en la instalación de un semáforo en el cruce con Pozos, los funcionarios del área determinaron como mejor opción extender el bulevar central para promover el uso de las avenidas.
Como se compartió en estas páginas, justamente a principios de mayo, el colegio Santo Domingo en la Sierra renovó un reclamo que ya había hecho con anterioridad en diversas oportunidades al Municipio para que se instale un semáforo en las cinco esquinas que comprenden la intersección de Brasil y Pozos, así como también la demarcación de las respectivas sendas de cruce peatonal.
Debe tenerse en cuenta que a una cuadra de distancia del lugar se encuentran también los colegios Ayres del Cerro y San Ignacio, que se suman al club Nahuel y Tahua. Todo el tráfico de niños y jóvenes se combina con el que reciben los numerosos locales comerciales que hay en las inmediaciones.
Además de los horarios pico de la mañana 7.15 y del mediodía y entre las 13 y las 14, esta intersección mantiene un intenso flujo de automóviles durante todo el día, con situaciones que incrementan notablemente el riesgo para peatones, al tratarse de cinco esquinas. También pasan por ese cruce dos líneas de colectivos, las cuales tienen allí sus paradas.
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