Desbordada la capacidad hotelera del sur santafesino, el campo quiere que el acto de mañana sea un hito en el conflicto
“Tenemos información de que está llegando gente, salvo de Tierra del Fuego y Santa Cruz, de todas partes del país”, destacó hoy el vicepresidente de la Federación Agraria (FAA), Pablo Orsolini.
El cálculo de convocatoria inicial de las entidades fue de 70 mil personas, pero conforme pasaron los días -y tras el fracaso de la reunión con el Gobierno- el número se fue incrementando, en medio de los tironeos políticos con la Casa Rosada.
“Estimábamos una base de entre 70 y 80 mil productores, pero viendo el entusiasmo que tiene la gente en la ciudad de Rosario, creo que vamos a andar sobre las 100 mil personas”, señaló Orsolini.
Otras proyecciones, quizás más cercanas al espectro político, prevén una convocatoria cercana a las 200 mil personas.
Guillermo Giannasi, dirigente de FAA en el interior de Buenos Aires, indicó que es “muchísima” la gente que ya está en viaje hacia el sur santafesino.
“Los productores están yendo en todo lo que pueden: Micros, auto y camionetas”, relató Giannasi a Noticias Argentinas, y precisó que “no hay sólo productores, también hay muchas familias enteras”.
En muchos pueblos del interior se abrieron listados callejeros para que la gente se inscriba en los distintos medios de transporte que desembocarán en el acto, previsto a comenzar a las 12:00.
En Rosario y zonas aledañas, las familias albergan en sus casas a los visitantes, ante el desborde de la capacidad hotelera.
Los dirigentes estudian hasta la posibilidad de que piqueteros oficialistas corten accesos a la ciudad, por lo que estancieros dispusieron sus campos como acceso a la metrópoli.
Esa injerencia piquetera sería sólo una variante del boicot por parte del Gobierno al acto, según lo denunciado por los ruralistas.
De acuerdo con los dirigentes, el Gobierno ordenaría un desabastecimiento de combustible, para evitar que la gente llegue al acto.
Giannasi explicó que el gasoil en Rosario y periferia se vende con cupos de 30 pesos, pero aseguró que este panorama se da “desde hace meses” y nada tiene que ver con un boicot.
“La gente está toda organizada. Las familias se llevan viandas, bebidas y van sin miedo, confiadas y en forma pacífica”, señaló Giannasi.
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